Diciembre nos recuerda, entre otras memorables fechas, el natalicio de Wifredo Lam, de quien el ilustre Alejo Carpentier expresara: “Y tuvo que ser un pintor de América, el cubano Wifredo Lam, quien nos enseñara la magia de la vegetación tropical, la desenfrenada Creación de Formas de nuestra naturaleza ─con todas sus metamorfosis y simbiosis─, en cuadros monumentales de una expresión única en la pintura contemporánea”.
A 122 años de su natalicio, La Jiribilla, revista de cultura cubana, encauza su mirada una vez más hacia la colosal obra de un cubano universal.