En su despedida de Venezuela, a la que consideró “cuna del continente libre,” Martí le escribe a Fausto Teodoro de Aldrey, director de La Opinión Nacional de Caracas, y le dice “los ideales enérgicos y las consagraciones fervientes no se merman en un ánimo sincero por las contrariedades de la vida. […] Deme Venezuela en qué servirla: ella tiene en mí un hijo”. Cada cubano digno sintió y siente como suyo ese generoso ofrecimiento que hoy, más que nunca, necesita ser levantado como un valladar contra los que intentan someter a un pueblo que, en su inmensa mayoría, eligió redimir los ideales que marcaron cada minuto de la vida y la obra de Bolívar, teniendo como guía al Comandante de América Hugo Chávez Frías.

Pie Waldo Leyva. Foto: Internet

Venezuela decidió ser libre, decidió entregarse generosa a la construcción de una América unida, orgullosa de sus hombres y mujeres, defensora de sus identidades múltiples. Puso en este empeño todos sus recursos materiales y humanos, haciendo honor a lo que alguna vez dijo de ella Humboldt cuando la calificó de “inteligente y hospitalaria”. Ese es su crimen y por eso la atacan sin piedad los que solo buscan lucrar con las riquezas de su suelo sin que les importe el precio que deben pagar los explotados y olvidados de siempre. A nadie debe resultar extraño que se junten en un mismo empeño, el imperialismo, la OEA y la reacción interna para derrocar el sueño de Bolívar. Para ellos eliminar la pobreza, devolver la vista a quienes tienen derecho a ver, enseñar a leer y escribir a quienes se les negó siempre toda enseñanza, poner la cultura y la ciencia al servició de la mayoría, es algo imperdonable. Pero Venezuela resiste y todos los hombres y mujeres dignos de nuestra América apoyamos y acompañamos sin reserva esa voluntad de resistencia. Es la hora de hacer lo que tengamos que hacer para que Venezuela triunfe de sus enemigos. “Hacer es la mejor manera de decir” dejó dicho Martí en el prólogo de su revista venezolana; díganos Venezuela como servirla.

Tomado de http://cubaendefensadelahumanidad.blogspot.com/