Tres vueltas a la ceiba

La Casa “Eusebio Leal Spengler” es un centro de ciencia y cultura que estudia y promueve el pensamiento, la vida y la obra del Eterno Historiador de la Ciudad, a partir de la investigación de su legado.

Como resultado de la metodología investigación-acción, la Casa ha exhibido variadas exposiciones fotográficas que han tenido como principio homenajear la labor de Leal durante más de 50 años al servicio de la restauración del Centro Histórico.

La llama del carisma, Tres vueltas a la Ceiba y Homagno (que hoy se presentan en formato digital) se realizaron en el período del 2021-2022, y tuvieron como espacio de presentación la propia sede de la institución, Amargura No. 65, Habana Vieja. Las muestran devienen del trabajo conjunto de curaduría entre la Revista Opus Habana y la Casa “Eusebio Leal Spengler”.

Este grabado de la Columna de Cagigal (1754) y El Templete (1828) fue publicado en la revista El Plantel una década después de haberse inaugurado este último edificio neoclásico.

Vista de la Plaza de Armas tomada desde el techo del Palacio de los Capitanes Generales. Aunque no se ha precisado la fecha de esta imagen, es muy anterior a 1927, ya que todavía no se había demolido el edificio de Capitanía.

Tomada en 1909, esta fotografía es una de las más antiguas que se conoce de El Templete. A la derecha, puede verse que existía un pórtico para tener acceso expedito desde los muelles a la Plaza de Armas.

En 1928, con motivo de celebrarse el centenario de la construcción de El Templete, se acometió su restauración. Esta foto fue tomada recién concluidas esas obras.

SIN PIE DE EXPONENTES

El interés de Leal por la restauración de El Templete se remonta a 1965, cuando todavía era un empleado de la administración metropolitana, antes de ser director del Museo de la Ciudad. Gracias a su perseverancia, el monumento y los cuadros en su interior fueron restaurados en 1978.

Cada 16 de noviembre, Eusebio Leal iniciaba siempre la procesión de habaneros que consuma el rito de rodear tres veces en silencio el tronco de la ceiba en El Templete. (Foto: Manuel Almenares. Archivo de la revista Opus Habana).

Cuando en 1754 fue derribada la supuesta ceiba primigenia, a cuya sombra nació la Villa de San Cristóbal de La Habana, fueron sembradas tres ceibas entre 1755 y 1757, de las cuales sobrevivió una, derribada en 1827 para construir El Templete. Al año siguiente fueron plantadas tres más, y de nuevo quedó solo una, remplazada en 1960. El más reciente relevo de ceibas fue en 2016. (Foto: Juan Carlos Bermejo. Archivo de la revista Opus Habana).

El nuevo ejemplar fue traído de Las Terrazas, Artemisa, el 15 de marzo de 2016. Sin embargo, no logró subsistir. Un año después, una segunda ceiba logró prender y es la que se mantiene hasta hoy día. (Foto: Juan Carlos Bermejo. Archivo de la revista Opus Habana).

Entonces se aprovechó para efectuar una ampliación de ese monumento neoclásico, recobrando el área que ocupaba en sus orígenes. El 16 de noviembre de 2017 fue inaugurado por el Historiador de la Ciudad, en el 498 aniversario de la Ciudad (Foto: Manuel Almenares. Archivo de la revista Opus Habana).

Interior de El Templete tras concluir su ampliación en 2017, que incluyó una restauración de los tres cuadros de Juan Bautista Vermay: La primera misa, El primer cabildo y La inauguración de El Templete. Con una Opus Habana en la mano, Leal Spengler explicó la iconografía de cada uno de esos lienzos al público asistente a la presentación de esa publicación (Foto: Manuel Almenares).

Gracias a las labores de restauración y preservación que han recibido a través de los años, las pinturas de Juan Bautista Vermay son documentos históricos que representan hitos simbólicos de la habaneridad. (Fotos: Juan Carlos Bermejo. Archivo de la revista Opus Habana).

En 2008, los habaneros celebraron el 489 aniversario de la refundación de la ciudad en su asiento definitivo. Cada vez que tenía lugar una severa inclemencia del tiempo, el Historiador de la Ciudad se preocupaba por la protección de los cuadros de El Templete. (Foto: Néstor Martí).