Un público ansioso y lleno de expectativas es lo que encuentra Telmary y su grupo Habana Sana al subirse al escenario en cada Festival Jazz Plaza y este año, en el Pabellón Cuba se repitió la intensidad con que explotó la química entre la cantante y su gente.

Interactúa con el público, baila con él, le gusta sentir la alegría y el calor de los que la admiran. Con su característico turbante, sus coreografías breves y su lenguaje irreverente convierten la velada en un exquisito performance. ¿Cómo no va a lograrlo si está estrechamente vinculada con las más profundas raíces de la cubanía? No solo por lo que se percibe a simple vista, sino por lo que transmite y las letras de sus canciones. Así lo mostró una vez más en los temas que interpretó en su último concierto, entre ellos: “Qué equivoca’o”, “Cógela como arde”, “Fuerza Arará” y “Como se pone La Habana”.

Ha mencionado en otras entrevistas la importancia de estos conciertos en el Pabellón: “Con mi gente de verdad, con los cubanos de a pie que están ahí de corazón”. De igual modo, se ha convertido en paradigma para la mujer cubana, es un ejemplo de fémina empoderada que combina el ejercicio de su profesión con la maternidad y cada vez que puede aprovecha un espacio del espectáculo para presentar a su hija Samara y animarla a que cante con ella alguna canción. Defensora de los derechos de la mujer, reafirma su posición respecto al tema, así lo evidenció cuando manifestó en el escenario: “Apoyo el feminismo de verdad, el que defiende la igualdad entre los seres humanos y no el que le da derechos a un género por encima del otro”.

Telmary con su flow hipnótico desborda sensualidad, equiparada con su pensamiento profundo en un discurso que integra frases del repentismo y su versificación para revelar un mensaje positivo, realista y poderoso. De esta manera, destaca en el ámbito musical cubano por su esencia afrocubana y por el uso de las temáticas urbanas para llegar mejor al público.

Luego de una gira de verano por el país en el 2019, donde promocionó su último álbum titulado Fuerza Arará, premio a la mejor producción discográfica en la categoría de Música Urbana del Cubadisco 2018, la rapera se reafirma como una de las voces más contundentes del género. En su tercer CD, producido bajo el sello Colibrí, posee una total independencia en cuanto a la elección de los temas. Diez canciones insertadas en diferentes géneros como el afrobeat, los cantos yorubas y la conga.

Más que una rapera es una repentista e ingeniosa poeta que constantemente está buscando ese legado de las formas de improvisación propias de la cultura nacional, las rescata y hace un hip hop que siempre suena a Cuba, es una labor por la que siempre se ha caracterizado desde el comienzo de su carrera, luego de su paso por Interactivo y ahora con su banda Habana Sana.

Al terminar el concierto el público coreó sin cesar que cantara otra canción. Al final sus oyentes lograron su afán y Telmary, se despidió a ritmo de conga. Ella, querida por ser una cubana auténtica, busca que la gente disfrute de su música y por eso ha expresado en disímiles ocasiones que dondequiera que va lleva un pedacito de esta Isla llena de sabor, sentimiento, son y timba.