Más allá de las consideraciones que puedan hacerse del trazo de Quino desde la pericia de un crítico de arte, es el mensaje profundo, gracioso, humanista y cercano lo que distingue la obra de este artista (no solo Mafalda, por cierto). Pero es justamente la vigencia del texto comunicador lo que mantiene a Mafalda en la preferencia de su público y lo hace crecer.