Con la inauguración de la sala Santiago Álvarez, del multicine Infanta en la capital cubana, el género documental adquiere un recinto donde se subraya y potencia su impronta en el cine cubano. A partir de ahora será sede permanente de la exhibición y desarrollo del género.

El acto se realizó el pasado 14 de marzo, Día de la Prensa Cubana, como parte de las actividades por el 60 aniversario del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) y del centenario del relevante documentalista.

Una programación especial de materiales de ese corte, tanto nacionales como foráneos, distinguirá la programación de ese lugar e incluirá importantes retrospectivas, eventos teóricos y homenajes a documentalistas.

La nueva sede exhibe en las afueras dos murales con momentos importantes de la vida de Santiago, así como su nombre a la entrada. No faltan tampoco instantes al lado del eterno Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

“No hay un documentalista que no haya sido inspirado por la obra y figura de Santiago”, dijo Ramón Samada, presidente del ICAIC, respecto a la figura del homenajeado.

Más adelante subrayó la colosal tarea de discutir y aprobar las propuestas para la realización de documentales, para lo cual existe un comité. “Por Santiago y por el cine cubano lo hacemos”, dijo.

Al comentar sobre esta sala, el sonidista Jerónimo Labrada, recién nombrado con el Premio Nacional de Cine 2019, dijo que se “rinde un homenaje físico y activo, dinámico, dedicado a uno de los grandes documentalistas del cine mundial y creador revolucionario incansable”.

Recordó que su obra fue multipremiada en todo el mundo, “impactó positivamente la expresión documental y una nueva forma de informar y comunicar los hechos relevantes de Cuba y del mundo”. Aseguró que los cercanos a él disfrutaron de una gran escuela de cinematografía y humanidad.

Así mismo abogó porque la designación de esta sala sirva para reanimar la deprimida producción documentalística del país, con falta de espacio en los años recientes. “Ese sí puede ser un homenaje a Santiago”, afirmó.

Quedó inaugurada también una retrospectiva de la producción cinematográfica del realizador: el Noticiero 142, acerca de la muerte de Benny Moré; un corto realizado por jóvenes estudiantes de la Cátedra de Periodismo Audiovisual Santiago Álvarez, de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana; y el documental Mi hermano Fidel.

Igualmente, se inauguró una muestra de fotografías con instantes de la vida profesional del homenajeado y carteles de varios de sus materiales fílmicos, curada por Jorge Frómeta, especialista del ICAIC. 

Se le hizo un reconocimiento a Lázara Herrera, viuda de Santiago Álvarez y directora de la Oficina que lleva el nombre del intelectual, por llevar a cabo la preservación y promoción de la obra del extinto realizador.

Al acto asistieron Abel Prieto, Director de la Oficina Nacional del Programa Martiano y presidente de la Sociedad Cultural José Martí; Maria Elena Salgado y Fernando León Jacomino, viceministra primera y viceministro de Cultura, respectivamente; trabajadores del ICAIC y numeroso público.