Sabor a África con Reminiscencia y BanRarrá
Una suerte de sortilegio provocó Reminiscencia en los santiagueros que disfrutaron de la pieza. Regalo de la compañía folclórica BanRarrá que usó particular estilo y energía, al interpretar auténticas tradiciones, de la mano de bailarines de expresiva dinámica y erotismo en sus movimientos.
Sala Van Troy de Santiago de Cuba, el 2 de junio de 2019. Fotos: Miguel Rubiera Jústiz
Al ritmo de melodiosas voces y toques de tambores discursaron en cada escena la teatralización de danzas de ciertas etnias africanas, con virtuosos juegos de fuerza, destreza en el uso de machetes, batutas, fuego, ensalzando coloridas banderas ante un vehemente y entusiasta público.
Guion y coreografía armonizaron para reflejar cómo, —procedentes de África bajo el colonialismo español— llegaron a Cuba negros en calidad de esclavos, nativos de diversas etnias (Nigeria, Congo, Dahomey y Calabar), que se mezclaron entre sí, pero muy fieles a sus costumbres y cultura.
Interpretado con maestría por el consagrado actor Jorge Ryan, Reminiscencia revela al esclavo Papá Francisco, quien fuera rey en su tierra y con orgullo evoca cantos, toques y danzas de ese continente, conservado en esta Isla como uno de los aportes más legítimos a la cultura nacional.
A Ryan le satisface mucho su personaje porque “representa un resumen de la historia, un homenaje a todos los hombres negros, blancos, mulatos que habitan esta nación. Mi personaje es la libertad, y la busca, la siente, la simboliza”, confiesa con emoción.
“Hacer esta obra en Santiago de Cuba tiene un alto significado, es un honor inmenso por los valores históricos, sociales y éticos de esta tierra, donde se reverencia y se vive el folclor de una forma peculiar, intensa”, declara.
Con dirección artística y general de Isaías Rojas Ramírez, la obra fue estrenada en marzo último con motivo del aniversario 25 de la Compañía y para saludar los 500 años de La Habana, y el 2 de junio volvió a escena en la sala Van Troi, de la ciudad de Santiago de Cuba, como parte de una gira nacional que incluyó a Guantánamo y Ciego de Ávila.
Estructurada en varias escenas, el embrujo se adueñó del auditorio, ya sea en África, donde el movimiento contemporáneo se entreteje con la danza folclórica para representar exóticos animales de la madre África, o con Zulú que difunde el ímpetu de los ritmos del Caribe.
Igual encantamiento provocó Bantú, con los bailes de Yuca y Makuta que recrean la fortaleza y presencia del Palo Monte en Cuba; la Tumba Francesa, con esclavos que imitan la elegancia de sus amos e incitan la competencia entre el tambor y el danzante, y Congo, Vudú, Gagá para que vibrara la riqueza extraordinaria de cantos, ritmos y danzas.
“Reminiscencia me ofrece posibilidades de probarme a fondo en las tablas, al integrar varias expresiones danzarias con la música y la actuación”, dice la joven primera bailarina y profesora Danneys Torres Bringas, egresada del Instituto Superior de Arte (ISA) en 2007.
Merecedora del Premio Ramiro Guerra en 2018, otorgado por la Asociación Hermanos Saíz, ella prefiere “el cuadro que permite disfrutar de los fodunes Arará, vigentes aún en el Cabildo de la Familia Baró en Jovellanos, Matanzas, una danza inédita en la Compañía.”
Isaías Rojas Ramírez, director de BanRarrá, destaca el amplio repertorio y sello tan particular de la compañía porque basa sus espectáculos en investigaciones acerca de la cultura franco haitiana, sobre todo, en predios de Guantánamo, donde surgió el grupo, luego en las provincias orientales y después en varias zonas del occidente.
Se nutre de jóvenes bailarines formados en la propia compañía y en escuelas de arte, quienes asumieron esa expresión que exige mucho del cuerpo y del alma para dominar bailes de salón, del campo como Tajana, Ború, Changüí hasta ChaChaChá, Rumba, Mambo, Pilón, Salsa, Casino…
Tras presenciar la obra, Juan Teodoro Florentino, especialista en Folclor y profesor del ISA, afirmó que desde el punto de vista de rescate de las tradiciones, mantener nuestras raíces y todas esas vivencias del oriente cubano, que quizás Fernando Ortiz nos ofreció, es importante, y elogió el trabajo de Rojas Ramírez que ha enriquecido el legado cultural del patrimonio de nuestra región.
que tiene amplio repertorio y la integran mayoritariamente jóvenes.
Puestas en escena como esta, añadió, fortalecen la fortuna de la cultura cubana, la herencia franco-haitiana que está presente en las ciudades y montañas; así como en las actividades sociales y económicas que se han preservado por generaciones.
Reminiscencia dejó un rico sabor a África en los amantes de ese folclor tan raigal en una plaza fuerte, leal como Santiago de Cuba.
Tomado de ACN