Una mirada a la historia urbanística de La Habana, a través de las artes visuales, es la propuesta de la exposición La Habana: imágenes de cinco siglos, la cual estará abierta al público en el Edificio de Arte Universal hasta el venidero 20 de abril.

¿Cuáles fueron algunos de los primeros planos de La Habana? ¿Cómo representaban la villa de San Cristóbal los grabadores del siglo XVII, muchos de los cuales nunca habían viajado a la Isla? ¿Qué apariencia tenía el puente de La Lisa a mediados del siglo XIX? Son algunas de las interrogantes que hallan respuesta entre las obras presentadas en esta muestra, que se une a los homenajes por los 500 años de la capital de todos los cubanos.

“El reto de condensar en un mismo espacio cinco siglos de historia nos obligó a hacer una rigurosa selección de los fondos del museo y a solicitar algunos préstamos imprescindibles a otras instituciones de la ciudad”, comenta María Lucía Bernal Delgado quien, junto a Manuel Crespo, Niurka Fanego y Néstor Martí, asumió la curaduría  de la exposición. Continuó: “Pretendimos incluir espacios que en el pasado no formaban parte de lo que hoy entendemos como la ciudad de La Habana y acudir a diversas manifestaciones de las artes visuales”.

La muestra, que cuenta con más de cien obras de artistas nacionales y foráneos, incluye una variedad de expresiones artísticas entre las que destacan la calcografía, la pintura, la fotografía y el cine. La exposición se articula a través de nueve espacios temáticos en progresión histórica; especial interés tienen los dedicados a la presencia indígena en la zona del centro histórico y en Guanabacoa, así como al barrio de Puentes Grandes, heredero del segundo asentamiento de los pobladores de San Cristóbal.

Un elemento de particular atractivo es el uso de la realidad aumentada (RA), una tecnología que, por primera vez, se aplica a una exposición en el Museo Nacional de Bellas Artes. La curadora nos cuenta:

En la sala es posible instalar la aplicación de RA en cualquier dispositivo móvil (sistema operativo Android), esto permite apreciar imágenes 360°, así como fotografías antiguas y textos informativos sobre los recorridos de antiguos caminos devenidos vías urbanas, la Zanja Real —primer acueducto de La Habana— y los cambios ocurridos en el perfil costero a consecuencia de la construcción del malecón, en la primera mitad del siglo XX.

Tradición y modernidad, poética y realismo son los contrastes de la exposición La Habana: imágenes de cinco siglos, la cual permite aprender mientras se aprecia el arte. Finalmente, en palabras de María Lucía Bernal:

La muestra está pensada de forma tal que el público pueda ver la evolución de la ciudad en el tiempo y la visión que diferentes artistas han tenido de La Habana, sorprenderse con imágenes poco conocidas, reconocer en los grabados los lugares emblemáticos de La Habana, aprender de la vida de los indígenas, de las plazas de toro, del cambio del perfil costero y hasta enamorarse de un Puentes Grandes casi olvidado por la historia.