En 2020 se conmemoró el aniversario 180 del arribo de la fotografía a Cuba, como evocación de la primera imagen al daguerrotipo que en 1840 realizara Pedro Téllez-Girón, hijo del entonces capitán general de la Isla. Y fue ese el motivo para hacer coincidir en un solo volumen, con el título Estudios críticos sobre fotografía cubana, textos emblemáticos de la historia del invento de Daguerre en la Mayor de las Antillas e incorporar noveles reflexiones que enriquecen el panorama historiográfico de casi dos siglos.

Con la coordinación del Doctor en Ciencias Rafael Acosta de Arriba, la antología vio la luz por la Editorial UH de la Universidad de La Habana. Su primera presentación en formato e-Book se realizó el 19 de noviembre de 2021, a cargo de la Dra. María de los Ángeles Pereira. Esta mañana de diciembre tenemos el privilegio y el gozo de contar con la edición impresa. Y digo privilegio y gozo, porque en los complejos tiempos que corren cada vez se dificulta más la impresión de textos en soporte de papel, con la satisfacción que ello causa, y en especial a los autores, pues hojear las páginas de ese objeto tangible llamado libro, amén del deleite espiritual que aporta su lectura, deviene un acto de sublime realización.

“Un total de dieciocho autores cubanos prestigian la selección”.

La presente compilación de ensayos constituye, probablemente, el primer aporte a la bibliografía sobre fotografía cubana que desde nuestra tierra se haya materializado. Gracias al interés e ingenio de Rafael Acosta, acucioso investigador, quien actualmente dirige la Revista de la Biblioteca Nacional José Martí, veintitrés textos engrosan las 406 páginas que recogen valiosas reflexiones sobre el devenir de la fotografía cubana y sus creadores. La gran mayoría fueron publicados con anterioridad en libros, revistas y catálogos de exposiciones. 

“La presente compilación de ensayos constituye, probablemente, el primer aporte a la bibliografía sobre fotografía cubana que desde nuestra tierra se haya materializado”.

Un total de dieciocho autores cubanos prestigian la selección, de los cuales cinco consolidadas voces del arte y la crítica duplicaron su presencia, con el aporte de imprescindibles reflexiones en materia de fotografía. En este último grupo se encuentran José Antonio Navarrete, Cristina Vives, Grethel Morell, Nelson Herrera Ysla y el propio Acosta de Arriba. En comunión convergen consagrados exponentes del patio con jóvenes intelectuales que afianzan su paso en el ejercicio de la crítica y la investigación. 

“Pensar la fotografía en Cuba”, con la firma del propio Rafael Acosta, se erige como texto introductorio, y ofrece un balance del comportamiento de los estudios en materia de visualidad, sobre todo en el ámbito académico nacional, al tiempo que reflexiona sobre conceptos y disciplinas de las ciencias sociales que tienen a la imagen en el centro de sus pesquisas.

“La presente compilación de ensayos constituye, probablemente, el primer aporte a la bibliografía sobre fotografía cubana que desde nuestra tierra se haya materializado”.

Como voz autorizada, Acosta de Arriba acumula una vasta experiencia en la publicación de libros y artículos sobre fotografía cubana, en la curaduría de exposiciones, como docente, conferencista, y hasta el presente es el único miembro de la Academia de la Historia de Cuba que ha dedicado su discurso de ingreso a la relación que existe entre el binomio historia y visualidad.

Los lectores tienen en sus manos un corpus bibliográfico, en orden cuasi cronológico, que desde el siglo XIX y hasta el presente recorre una parte apreciable de la historia de la fotografía en el país, cuyo viaje inicia con el emblemático y multicitado ensayo “Apuntes sobre la historia de la fotografía en Cuba en el siglo XIX”, de la fotógrafa e investigadora María Eugenia Haya (Marucha), una de las fundadoras y primera directora de la Fototeca de Cuba.

“Como voz autorizada, Acosta de Arriba acumula una vasta experiencia en la publicación de libros y artículos sobre fotografía cubana”.

De la mano de reconocidos investigadores como Rufino del Valle, Ramón Cabrales y José Antonio Navarrete es posible adentrarnos en los inicios fotográficos de la isla y recorrer La Habana de Charles D. Fredricks, fotógrafo norteamericano que abrió su primera galería de retratos en la capital cubana hacia 1857.

También del profesor Cabrales nos llega la historia del Club Fotográfico de Cuba, uno de los pocos textos de la presente antología que resalta el papel insuficientemente estudiado del asociacionismo fotográfico en el país, y que junto a “Elogio del retrato. Fotografías de Joaquín Blez”, de José Antonio Navarrete, se inscribe en el período republicano, etapa que aún registra temáticas y autores en espera de ser estudiados.

Sin duda alguna, cuando se trata de aunar lo más sobresaliente del pensamiento sobre fotografía cubana, resulta cardinal el ensayo “La imagen fotográfica del subdesarrollo”, de Edmundo Desnoes. A casi sesenta años de su publicación, la agudeza de sus reflexiones se mantiene vigente. En este corpus documental, vale resaltar la elección de textos que examinan desde la denominada “fotografía de la épica” hasta la fotografía documental cubana en las últimas décadas, con sus continuidades, rupturas conceptuales y evolución. Ellos son: Cristina Vives, Grethel Morell, Nelson Herrera Ysla, Juan Antonio Molina, Nahela Hechavarría, Magaly Espinosa, Alain Cabrera, Willy Castellanos y Adriana Estévez.

Dentro de las temáticas que forman parte de la creación fotográfica nacional, en los que la imagen ha dejado huella, como es el cuerpo, y en particular el desnudo, es posible profundizar a partir de los ensayos de Rafael Acosta de Arriba y Yenny Hernández. Asimismo, con la intención de visibilizar temas de la creación fotográfica contemporánea, en los cuales se precisa continuar indagando, Maikel Rodríguez Calviño y Hamlet Fernández colocan su mirada en la fotografía de temática gay y en la estética de la muerte, respectivamente, que va más allá del cuerpo yacente o descompuesto.

“(…) contar con un libro como Estudios críticos…, en ambos formatos, digital e impreso, constituye un verdadero lujo y una valiosa oportunidad”.

Constituye un elemento a destacar en este volumen la inclusión de tres anexos y un índice onomástico, información que desde el punto de vista bibliográfico enriquece y complementa los textos, con el aporte de nuevos datos. En primer orden, “Cronología de los 90” presenta una selección de grandes eventos y exposiciones de fotografía en esa importante década, que culmina en 1999 con el Salón Nacional de Fotografía. El Anexo 2 acerca al lector a algunos hechos importantes sucedidos en el panorama de la fotografía en Cuba desde 1983 a la fecha, con la precisión de eventos y sus respectivas temáticas, entre los que se incluyen los de corte académico. Y para finalizar, un dossier de fotografía cubana despliega 28 imágenes, que como destaca Acosta de Arriba “es una representación muy sintética del itinerario progresivo de la historia de la fotografía en Cuba, organizado cronológicamente, en el que aparecen algunas fotografías fundamentales, hitos en esa larga historia” y que fueron vistas en 2018, en la exposición antológica de fotografía cubana La imagen sin límites, que tuvo lugar en el Edificio de Arte Cubano del Museo Nacional de Bellas Artes.

“Constituye un elemento a destacar en este volumen la inclusión de tres anexos y un índice onomástico, información que desde el punto de vista bibliográfico enriquece y complementa los textos, con el aporte de nuevos datos”.

El trabajo editorial de Estudios críticos… estuvo a cargo del profesional equipo que encabezaron los editores Julián Bravo y José Antonio Baujín, a los cuales se sumaron Alexis Manuel Rodríguez, Claudio Sotolongo y Camila González en el diseño, y Vanesa Lamar en la composición. La imagen de cubierta, fotografía realizada en la década de los cincuenta por Roberto Rodríguez Decall, miembro del Club Fotográfico de Cuba, imprime al volumen la elegancia y el enigma del cuerpo desnudo de una mujer cubana.

Por consiguiente, resulta innegable la utilidad del libro que hoy presentamos. En tiempos donde el acceso a bibliografía actualizada sobre fotografía cubana se convierte en un calvario, entre otras razones por la dispersión de la producción intelectual sobre estos temas, tanto por autores cubanos como foráneos; o porque la mayoría de las veces se dificulta incorporar las obras a los catálogos desactualizados de bibliotecas y centros de información, contar con un libro como Estudios críticos…, en ambos formatos, digital e impreso, constituye un verdadero lujo y una valiosa oportunidad, sobre todo para los estudiantes universitarios, docentes e investigadores, y para aquel que se interese por el conocimiento de la fotografía como uno de los ejes culturales a través de los cuales se ha representado y representa la nación.

Para quien suscribe estas líneas, el volumen es una auténtica Biblia a la hora de trazar la ruta historiográfica en las investigaciones sobre fotografía cubana, particularmente en el estudio de la obra de fotógrafos emblemáticos como José Gómez de la Carrera, Enrique Kiko Figarola y Generoso Funcasta, cuyas colecciones conserva la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí.

“…el volumen es una auténtica Biblia a la hora de trazar la ruta historiográfica en las investigaciones sobre fotografía cubana”.

De igual modo, he de destacar que en el magno esfuerzo de sistematizar lo más relevante de la historiografía cubana en el ámbito fotográfico, se advierte la inclinación y mayor interés en la investigación y la crítica de la fotografía cubana con posterioridad a 1959, así como el estudio de autores más contemporáneos, lo cual pone en alerta las brechas en la investigación de etapas y fotógrafos de períodos insuficientemente estudiados como la Colonia y la República.

En resumen, hoy contamos con dos opciones para el disfrute y provecho intelectual de este volumen sobre la historia de la fotografía cubana: la tradicional que nos ofrece el libro impreso, y la moderna que posibilita la lectura en dispositivos electrónicos y móviles. La elección de una de ellas o de ambas permitirá comprender, con mirada crítica, el camino que en materia de fotografía hemos construido en nuestro país hasta el presente, y plantearnos nuevos retos en la investigación, en un mundo cada día más visual y diverso.