El jazz es capaz de generar las más insospechables sensaciones. Ese espíritu de libertad, al que hiciera alusión la obra plástica del pintor y escultor Alberto Lescay, y que sirvió de cartel del evento, explora recónditas zonas de la creación.

Desde ese concepto, el artista Luis Carlos Puerta (Puerto Padre, 1972), pintor de academia, se interesa por dos grandes pasiones: la pintura y la música, unidas en la exposición Havana in Jazz, inaugurada en el vestíbulo del teatro Mella como parte de las actividades del XXXIV Festival Internacional Jazz Plaza 2019.

Confiesa el creador que el jazz: “es una forma de vida, expresión y libertad, es el género de la música que más guarda relación con las artes plásticas”.

A través de la historia, innumerables pintores han abordado la música: Matisse, Picasso, Basquiat, entre otros. En el caso de Puerta, el pintor viene estudiando el tema hace aproximadamente 8 años, en los que ha tratado de que el estilo cubano del jazz sea reflejado en su obra, “trato de darle esa diferencia que lo distingue”.

Y es visible esa intención en el resultado final de su trabajo: el jazz y La Habana se funden en cuadros de acrílico sobre lienzo y papel, desde el mundo onírico que le sugiere el género, que traduce en figuras inmersas en el goce musical, provistas de los instrumentos típicos de la percusión cubana contemporánea. Se aprecia, en el trasfondo, esta capital próxima a sus 500 años, bucólica, aderezada con su arquitectura típica, casi surrealista, también en pleno convite.

Resulta llamativo el tratamiento del color, amalgamado con tonalidades contrastantes y claroscuros, así como la combinación de fuertes y delineados trazos.

Reconoce que Alejo Carpentier y sus estudios sobre La Habana, a la que el escritor denominara “ciudad de las columnas”, constituyen asideros sobre los que sostuvo este grupo pictórico.

El creador fue invitado por el sello discográfico Bis Music, uno de los más destacados en la promoción de este tipo de música y que ha aunado a importantes artistas de la escena jazzística cubana en su catálogo de excelencia. Varios de esos músicos fueron reconocidos con obras de Luis Carlos, entre ellos: los bateristas Enrique Platt y Horacio “El Negro” Hernández, los pianistas Emilio Morales y Alejandro Falcón, el bajista Jorge Reyes y el saxofonista Janio Abreu.