Palabras: el valor de la memoria
En ocasión del aniversario 60 del histórico discurso de Fidel Palabras a los intelectuales, fue inaugurada en la Galería Galiano, del municipio capitalino de Centro Habana, la exposición Palabras: el valor de la memoria. La curaduría de la muestra, en circulación por las redes sociales desde el pasado 28 de junio, estuvo a cargo de un equipo integrado por cuatro especialistas, entre los que figura la licenciada Sandra García Herrera, quien a propósito de este acontecimiento declaró en exclusiva: “Esta exposición es nuestro modesto, pero muy sincero homenaje a la inmensa labor de nuestro Comandante en Jefe y en particular a uno de sus discursos más trascendentales”.
Anclado en los principios del pensamiento martiano, Palabras a los intelectuales, discurso pronunciado por Fidel como clausura del encuentro sostenido durante tres días con la vanguardia artística y literaria cubana en la Biblioteca Nacional, trazó las pautas de lo que sería la política cultural de la nación. “Nos hubiera gustado, dijo igualmente la especialista principal de la galería Galiano, conformar la exposición con nuevas piezas. Pero lamentablemente la situación epidemiológica que vive el país a causa de la COVID, no nos permitió ese necesario encuentro directo con nuestros creadores. Eso nos obligó a buscar un discurso curatorial a partir de las obras con que contábamos. No podíamos pensar en piezas emblemáticas, como tampoco en artistas que sabemos tienen obras relacionadas con este tema.
“Nuestra principal tarea era tratar de encontrar un eje central. Tratar de ordenar el discurso, es decir, el mensaje que queríamos trasmitir, a partir de la selección de las piezas que teníamos a nuestro alcance y estas eran las obras de la colección del Fondo Cubano de Bienes Culturales. Obras que el propio Fondo ha adquirido a través de lo que nosotros llamamos internamente medios propios.
“Por otro lado estaba el hecho de que Palabras a los intelectuales tuvo en su momento disímiles interpretaciones y lecturas, y su repercusión, aunque fue y sigue siendo extraordinaria para la política cultural del país, no contó con una aceptación total, si tenemos en cuenta sobre todo el momento en que se produjo este suceso, que fue en 1961, a escasamente dos años del triunfo de la Revolución. De ahí que algunos intelectuales y artistas acogieran con beneplácito el discurso de Fidel, mientras otros mostraron indiferencia o simplemente no lo aceptaron”.
Para los cuatro especialistas estuvo entonces el gran reto de lograr una propuesta visual que no fuera en una sola dirección, “ni de crítica ni de aceptación total, sino buscar una visión colectiva de todo lo que pudo generar ese discurso en su momento. Descubrimos así que podíamos concentrarnos en el humanismo como línea central de pensamiento, en el hombre como centro esencial, principal, de todas las cosas, porque un creador aunque tenga capacidades diferentes para hacer su obra, al final es un ser humano y piensa, siente y padece y es eso lo que refleja en sus creaciones. De esto trata esta muestra, en la que están representadas la racialidad y la religiosidad. Hay obras que tienen que ver con temas políticos, con la emigración, en fin, toda la problemática que ha acompañado al arte cubano desde los años sesenta hasta la actualidad”.
La cultura de la belleza y la armonía, abordadas por Fidel en su premonitorio discurso y proclamadas tantas veces en los tiempos actuales por el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel, convergen en esta exposición en la que se pondera al ser humano como ente social y eje central de la historia.
Veintiséis creadores, con igual número de piezas, participan en Palabras: el valor de la memoria, que se extenderá hasta el venidero mes de agosto y en la que están representados desde artistas muy jóvenes como Alejandro Gómez, hasta consagrados creadores, incluyendo Premios Nacionales de Artes Plásticas, como el maestro Manuel Mendive, Lázaro Saavedra, Nelson Domínguez y Pedro Pablo Oliva. “Podríamos decir, subraya García Herrera, que desde todos los puntos de vista la muestra resulta una especie de abanico de temas, de criterios de distintas generaciones. No solo por sus exponentes, sino también por su conformación, pues en ella pueden apreciarse fotografías, esculturas realizadas en bronce, pinturas y objetos. Tenemos, por ejemplo, una silla maravillosa de Mendive, que puede ser considerada como pieza única. Hay también grabados, es decir, están presentes casi todas las modalidades de las artes plásticas”.
“La cultura de la belleza y la armonía, abordadas por Fidel en su premonitorio discurso (…), convergen en esta exposición en la que se pondera al ser humano como ente social y eje central de la historia”.
A raíz de aquellos memorables encuentros de Fidel con la intelectualidad cubana y correspondiendo a su llamado, nació la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), institución que a través de sus distintas filiales extendidas por todo el país, agrupa a la vanguardia artística de nuestra nación y que en el mes de agosto festejará también el aniversario 60 de su creación. Uno de los desafíos que tiene por delante esta institución, a decir de algunos de sus fundadores, es lograr un mayor acercamiento de los jóvenes a sus filas. Y precisamente, en aras de contribuir al cumplimiento de esa impostergable necesidad, la Galería Galiano dedica su espacio “para exhibir obras de artistas jóvenes, menores de 35 años, lo que en arte se conoce como creadores emergentes”.
Aunque la galería fue concebida desde su propia construcción, en 1962, como lugar para exhibir obras de arte, poco tiempo después de su inauguración fue utilizada como oficinas de varias instituciones culturales. “Hasta que finalmente, en 2013, reabre sus puertas después de un arduo trabajo de restauración a cargo del Fondo Cubano de Bienes Culturales. Desde esa época hasta hoy en todas las exposiciones que organizamos, al margen de que sean colectivas e incluyan a artistas consagrados, contamos siempre con obras de creadores jóvenes, recién graduados, es decir, de aquellos que están comenzando en el mundo del arte”.
Uno de los proyectos más importantes que tiene lugar en esta institución, dedicada íntegramente a artistas noveles, es el conocido como Post-IT, un certamen de carácter anual que se organiza desde 2013. “Se trata de un concurso de arte contemporáneo dirigido a artistas menores de 35 años de edad. En estos momentos está en curso la convocatoria para la celebración de su octava edición, que a juzgar por la situación actual tendremos que realizarla de manera virtual como la del pasado año. Las obras ganadoras del concurso, seleccionadas previamente por un jurado, se exhiben en nuestra galería, donde se efectúa, a partir de las obras escogidas, la premiación de la mejor, de la más sobresaliente.
“Otra actividad relevante de la galería es su participación en las distintas ediciones de la Bienal de La Habana. Hemos participado en dos eventos de este tipo, en 2015 y en la última celebrada en 2019. Nuestra participación está dirigida a promocionar las exposiciones colectivas como parte del programa de actividades colaterales de este importante encuentro.
“En sentido general nuestro principal propósito es que los jóvenes cuenten con un espacio donde puedan mostrar los primeros resultados de su labor creativa, donde realicen su primera exposición personal. Otra galería que prestigia las obras de creadores noveles es la galería Servando, radicada en 23 y 10, en el Vedado, municipio Plaza de la Revolución”.
A partir de su vasta experiencia como profesional de las artes visuales, Sandra García Herrera, graduada de Historia del Arte, aseguró finalmente que “quienes observen nuestra exposición podrán ver todos los matices del discurso de nuestro inolvidable Comandante. A través de ella podrán interpretar sus trascendentales palabras desde todas sus aristas, con sus luces y sombras a la distancia de más de medio siglo”.
Tanto la muestra Palabras: el valor de la memoria, que se exhibe en la Galería Galiano, como la propuesta Palabras, imagen y posibilidad, inaugurada el 30 de junio en la Biblioteca Nacional José Martí, son reveladoras además de acertados ejemplos del carácter inclusivo y heterogéneo de la política cultural de nuestro país, enarbolado por Fidel hace 60 años en su histórico discurso Palabras a los intelectuales.