“Vicente se despidió de la vida trovando y cantando, y así mismo lo despedimos, con el aplauso eterno que merecen los grandes artistas, para que no se pierda en el camino desde la ‘nube’ donde ahora viaja hacia la eternidad, porque ‘créeme’, los músicos y tu pueblo no te olvidaremos nunca”.
Vicente Feliú se nos fue a destiempo y de la manera más poética en la que podría imaginar un trovador. “La Bayamesa” en su guitarra anunció su partida hacia el abrazo del hermano y de los amigos, hacia la gloria eterna de la música cubana.
La Jiribilla compila en este dossier el sentir de los amigos que hoy lo despiden y así se une al tributo que le rendirá siempre el pueblo de Cuba.