“Nostalgias de La Habana”, así nombró el reconocido fotógrafo cubano Roberto Salas a su más reciente exposición, inaugurada el pasado 25 de octubre en el Memorial José Martí con motivo del 500 Aniversario de la capital cubana. La muestra constó de un total de 58 imágenes de los municipios La Habana Vieja, Vedado y Cerro fundamentalmente.

A consideración de Salas: “Esta muestra es una interpretación, un re-juego visual sobre la ciudad y una realidad que se mantiene. Pretendo sólo una imagen fragmentada de ella, no venderla como destino turístico. Para esto están las tarjetas postales. Las técnicas digitales y algunas de sus infinitas posibilidades con texturas y colores variados me han llevado a este producto final. No creo ni pretendo haber descubierto nada, ni mucho menos una obra insuperable. Aquí está ‘Mi Habana’, otra forma de verla, otra manera de apropiarme de ella y sentir nostalgia por lo que fue, es y pudiera ser”.

Esta exposición podrá ser apreciada hasta el 19 de noviembre del presente año. Es la mayor muestra en cuanto a cantidad de ilustraciones, donde todas juegan con los contrastes y abarcan disímiles espacios y planos. Las fotografías están enmarcadas en un período de tiempo de siete años aproximadamente. No hay una secuencia lógica o un hilo conductor que las una, excepto el tema central, cada toma fue elegida al azar por la subjetividad del autor, sin embargo, es perceptible la empatía de este con la ciudad, la cual considera que es “un misterioso atractivo que se ha detenido en el tiempo”.

Roberto Salas ha tenido una extensa trayectoria en el universo de la fotografía, hizo sus primeros trabajos para el periódico El Imparcial de New York, de 1963 hasta 1964 se anexó al diario Revolución y la revista Cuba, también colaboró con la revista Bohemia y es fundador del periódico Granma. En su larga trayectoria profesional fue el fotógrafo de la dirección de Prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba. A sus 78 años, afirma que la fotografía es un entrenamiento que practica con todo el profesionalismo adquirido durante su carrera y que le permite mantenerse activo, en esta etapa de su vida.

“En esta exposición dedicada a los 500 años de La Habana, Roberto Salas nos muestra distintas perspectivas y miradas de la capital cubana, la ciudad portuaria que se exhibe cual modelo real, a la pericia del fotógrafo. Los diferentes elementos componentes de la visualidad habanera aparecen en estas fotografías”, consideró Rafael Acosta Arriba, curador de la exposición.

La Habana, ofrece diversos rostros a quienes la observan. Como ciudad, es percibida desde la mirada del que la reside, la del turista que la contempla por primera vez y entre otras… desde el lente de Salas, quien insiste en reinventarla, en mostrarla bella y real.