Más detalles en el órgano

Vengo, con entusiasmo beisbolero, a presentarles un libro de un cuarto bate al que yo llamo profesor por esa capacidad suya de percibir el veneno de ciertas bolas, la desviación peligrosa de aciagos lances del pragmatismo nacional y la malignidad de los “cambios” (del mismo imperio) para conseguir, con otra velocidad y con otros embalajes, tragarse a Cuba y a sus sueños de justicia, y por decir, tan finamente y con tan rigurosa prosa, verdades “rompe cercas”.

Los adoradores de Bad Bunny o de Chocolate MC no conocen al Doctor en Ciencias Filológicas, Luis Toledo Sande. Esos, presos en su ignorancia, desconocen al escritor (poeta y narrador), investigador, ensayista y periodista, cubano como el que más y guajiro de Velasco, Holguín, desde el 18 de agosto de 1950. El que llegó a ser director del Centro de Estudios Martianos y subdirector de la revista Casa de las Américas, no para hacerse “famoso”, como aspiran los aludidos, sino por ser virtuosamente útil a la causa cubana que ha defendido también como diplomático. Estos no saben la falta que les hace leer sus sabias reflexiones ni sus “Oído en la calle”, socializados en Facebook.

Los que han venido hasta aquí son más libres de conocer y reconocer a este apasionado martiano, autor de libros imprescindibles como Ideología y práctica en José Martí, José Martí, con el remo de proa, y sobre todo, Cesto de llamas,biografía por laque recibiera en 1996 el Premio de la Crítica de Ciencias Sociales; a este gran intelectual revolucionario, y revolucionario intelectual, merecedor de la Distinción por la Cultura Nacional y la Réplica del Machete del Generalísimo Máximo Gómez, más otros premios que aún le deben, en mi modesta opinión.

Muy incómodo para algunos jefes acomodados en la inercia o para pragmáticos neoliberales “enguayaberados” de revolucionarios, así como para esos intelectualoides a los que mortifica con su imperturbable fe en el socialismo y en la Revolución. Militante de la justicia, ese “sol del mundo moral” que ilumina hasta los detalles, “ásperos o lisos”, de la Cuba de hoy, la cual critica y ama como un observador comprometido, como puede comprobarse en cada uno de sus textos. Una fe que cabalga esperanzadora, y que, más que credo, es fidelidad martiana a los pobres de la tierra y “lealtad reflexiva” al proyecto de nación iniciado en 1959.

No vine a presentar al “cuarto bate” que me convocó, sino a su libro Más detalles en el órgano. Cuerdas y claves en la Cuba de hoy, que publica la editorial Extramuros de La Habana. El volumen fue editado por Yanelis González Leyva y corregido por Carmen Romero Alemán. El diseño de cubierta y composición estuvo a cargo de Damaris Rodríguez Cárdenas, la misma que se encargó de identificar a su “hermano mayor” con un grafitiurbano realizado en 2012 en la calle San Miguel, en Centro Habana, y que delinea el espíritu patriótico y contemporáneo de los textos que lo integran. Me refiero al precedente volumen Detalles en el órgano. Cuerdas y claves en la Cuba de hoy, editado también por esta editora en 2014.

El subtítulo compartido por las dos series —lo explicó el propio profesor en la introducción a la primera (“Pulsando”)— proviene de uno de los juicios expresados por José Martí en su Cuaderno de apuntes número 1, con solo 18 años. Allí Martí apuntó: “Nada ha de ser. Nada está predestinado a ser”, y “Todo en el mundo, menos él mismo, es el efecto del azar”. Expresión que informa no solo de la excepcionalidad del Héroe Nacional cubano, sino de su capacidad para entender dialécticamente la realidad de su tiempo y el “problema cubano”, para cuya solución organizó un partido de “rebeldes cordiales” y una guerra sin odios. Así, apreció que “un pueblo es en una cosa como es en todo”, que “hay causas probadas y evidentes: ¿a qué buscar causas impalpables e improbables?”, y que “un detalle en el órgano es a veces una revolución en el sistema”.

El profesor Toledo Sande, como antes Martí, tiene en mente el sistema social como un todo, de ahí “las cuerdas y las claves” del subtítulo. El autor reitera que cuando se emprenden cambios en ese sistema que es el archipiélago cubano —llámense actualizaciones, ajustes, modificaciones, reformas—, se debe pensar muy seriamente y con plena conciencia que un error sobre cualquier detalle puede hacer evolucionar —o contrarrevolucionar— el todo, para mayor prosperidad y soberanía, o para mayores desgracias o sujeciones al azar.

La idea de una nueva edición aumentada, o de una segunda serie que ahora presentamos, fue anunciada por el profesor antes de que saliera de la imprenta el primer libro. Como compartió en una entrevista, tuvo que “dejar fuera numerosos textos que ya estaban escritos y que podían haber formado parte del libro”. Luego de cerrada aquella selección siguió escribiendo y creciendo la serie. Entonces comentó que se podrían incluir textos de igual extensión sobre la llamada cuestión racial, como “Seamos humanoascendentes” o “¿Y si no fuéramos genéticamente mestizos?”, que ahora tendremos la posibilidad de releer sobre el papel. También adelantó materiales sobre las relaciones históricas y más contemporáneas entre Cuba y los Estados Unidos, como “Cultura, historia y un águila que sí caza moscas”, “Sí, Obama es mejor que Bush” y “Cuba y los Estados Unidos, otra etapa”, que ahora se incluyen junto a otros más recientes y de la misma cuerda antiimperialista: “El antiimperialismo no es una servilleta”, “De aquellas Trece Colonias a hoy” y “¿Qué confirma el patán Donald?”.

Más detalles en el órgano está integrado por 48 textos (el doble del anterior) escritos entre 2010 y 2019, y motivados por vivencias personales, acontecimientos nacionales, anuncios o noticias (algunas falsas), tendencias del subsuelo que Toledo Sande presiente; fenómenos que corroen lenta pero persistentemente la decencia y la salud sociales, que explotan en la cara de muchos y son subvalorados como meros fuegos artificiales. Como declara en el preámbulo, en “Seguir pulsando” se presentan textos ordenados con voluntad básicamente cronológica que han sido objeto de modificaciones leves.

“Esta colección, como la otra, reúne registros de sus combates por salvar las esperanzas de una patria y una humanidad mejores, más libres y prósperas”.

Distingue a esta serie de la primera el hecho de que muchos de estos artículos no fueron publicados inicialmente en el periódico Cubarte, en la extinta sección de “Letra con filo”, sino que vieron la luz en otros sitios digitales como Bohemia, Cubadebate, La Jiribilla, Granma y su blogpersonal Artesa en este tiempo. Aunque, como pasó con los anteriores, en su mayoría fueron replicados en otros medios, incluidas publicaciones impresas.

Esta colección, como la otra, reúne registros de sus combates por salvar las esperanzas de una patria y una humanidad mejores, más libres y prósperas. Son “briznas tanto de preocupaciones, como de esperanzas que desvelan al autor”, de un “bien nacido” —como sabemos muchos—, a quien no le resultan ajenos problemas tan serios como los que debemos resolver, y sobre los que reflexiona “un ser humano que se acerca a sus temas con la preocupación propia de quien reconoce la gravedad de los obstáculos que urge vencer, y con el deseo de contribuir al empeño de vencerlos, de participar en él, único que puede salvarnos las esperanzas”. [1]

Con ellos, toma partido contra la corrupción y el racismo en defensa de la equidad y el buen decir, por poner solo un ejemplo de sus batallas. Además de su patriotismo y su vasta cultura, se desborda en ellos la vocación descolonizadora, antiimperialista y antimonárquica del profesor Toledo Sande.

“Toma partido contra la corrupción y el racismo en defensa de la equidad y el buen decir”.

Primordiales son sus consideraciones y alertas en torno a la guerra cultural y simbólica que se nos hace, en textos como los titulados “La impertinencia de ‘los americanos’”, “¿Se trata de símbolos?”, “Notas eventuales sobre educación e identidad cultural”, “¿Cosmopolitismo o huellas de colonización?” y “La cultura en el centro de la vida”. En ellos nos advierte: “Es indispensable mantener alerta el pensamiento, y ello supone una actitud profundamente cultural. El imperio, que invierte en fomentar y difundir vacíos culturales, no deja de pensar ni un momento en cómo conservar y fortalecer su poderío por distintos caminos, incluidos los productos audiovisuales que le convengan”.

Todos están escritos “con Martí”, aunque solo una parte tengan como centro su legado político y, especialmente, sus lecciones de ética. Destaco en tal sentido “Lincoln y Cutting en una cita de José Martí”, “José Martí contra águilas y serpientes”, “José Martí en Nueva York: razones de una estatua que mueve” y “Balas ominosas contra José Martí”.

Los de Toledo Sande son análisis de pertinente hondura; su prosa es aguda y sus ideas son vertidas y articuladas con belleza y calidad lingüística, con ese tino martiano para hacerlas latir y resonar en el caudal de reflexiones que nos han izado hasta aquí. Son sus mejores armas para decir y hacer con Martí y Fidel; para pensar bien y actuar mejor como hombre de nuestro tiempo. También “se luce” en eso de tener presente que lo predominante para atreverse a escribir una página —lo cito—  está “más cerca de la humildad que de la soberbia” y que “no se puede poner en palabras toda la realidad”. De ahí que confiese y acote el alcance y los propósitos puntuales de estos trabajos para la prensa. Vale destacar su adaptación a las nuevas dinámicas del ecosistema digital con textos cada vez más concisos y contundentes.

“Los de Toledo Sande son análisis de pertinente hondura; su prosa es aguda y sus ideas son vertidas y articuladas con belleza y calidad lingüística”.

Mucho pueden aportar estos textos y colecciones a la necesaria cultura del debate, en el camino a ser más participativos y democráticos. Son muy útiles para los decisores y para los que implementan las políticas públicas en nuestro país, así como para los periodistas empeñados en revolucionar nuestra prensa.

Ya sabemos quienes lo seguimos en Facebook que el profesor ha seguido escribiendo sobre estos temas cardinales y sobre otros que también han “calentado” el debate virtual —como los de la calle— con tanta hondura y sabiduría como los de estas dos series. Podrían sumarse, por ejemplo, los publicados recientemente en Cubaperiodistas y La Jiribilla. De modo que ya debería proyectar la editorial Extramuros la expansión de estos dos volúmenes, con otros Nuevos detalles en el órgano.

¡Esperamos por ello!

Notas:

[1] http://cubarte.cult.cu/periodico-cubarte/luis-toledo-sande-las-preocupaciones-y-esperanzas-que-me-animan-i/