Madre se fue, sin decir adiós
Julio César Sánchez Guerra / Imagen: Tomada de palestinalibre
27/10/2023
Atraviesa una luz
la sinagoga, la mezquita, el templo
en Jerusalén.
Pero los hombres olvidan
las palabras
para cruzar el río Jordán.
Eso que ves caer
sobre la ciudad,
no es una estrella enloquecida
que por el amor se muere:
Es la Muerte de la muerte en las manos de un niño.
No son tatuajes lo que ves,
es la piel quemada por el odio.
En la rama humeante no cantan los pájaros.
Hay una mordida del Hombre
y no amanece.
¿Dios? Se ahoga en la ciudad triturada por los gritos.
Un niño camina por el borde
de las paredes vacías,
el patio: mudo de juegos y esperanzas:
Madre se fue, sin decir adiós.