Los foráneos ¡impostergables! del Jazz Plaza 2023

Desde hace 38 años, el Festival Internacional de Jazz en Cuba, el conocido Jazz Plaza, es un referente de los eventos de este género en el mundo. Progresivamente, La Habana se ha convertido en una ciudad a la que también desean llegar los jazzistas de todas las latitudes para intercambiar, compartir, componer, crear alianzas, disfrutar, vivir la música.

No solo porque Cuba es una nación con un rico acervo cultural y es la música uno de sus más importantes patrimonios. Sucede que también el jazz cubano ha crecido, ha marcado pautas y estilos, y los cultores del género en el país han sabido, con calidad y perseverancia, hacerse de un sitio a nivel internacional y protagonistas de colaboraciones excelsas con otros de renombre en escenarios de similar importancia.

No es casual entonces que encontremos nombres imprescindibles del jazz a nivel global en el programa del evento. Ellos quieren venir y nosotros los anhelamos recibir. Entonces se impone que organicemos nuestras agendas, porque si bien las propuestas de los participantes cubanos son de lujo —y convido a disfrutarlas—, no es menos cierto que los foráneos que llegan nos ofrecen presentaciones exclusivas, irrepetibles, y que deben ser impostergables.

Repite la visita a Cuba Karen Briggs, violinista estadounidense que el año pasado, durante el Cubadisco, quedó enamorada de la Mayor de las Antillas. Su popularidad se desplegó a partir del acompañamiento durante 13 años al tecladista griego y compositor de música instrumental Yanni. Sin embargo, esta excelsa intérprete tiene en su haber otras experiencias musicales con bajos musicales con Dave Grusin, Stanley Clarke, Marla Gibbs y Ashley Maher.

Igualmente de Estados Unidos recibimos a la banda Jungle Fire, con sus marcadas influencias de James Brown, Fela Kuti, Ray Barreto y la agrupación cubana Irakere, defendiendo en su repertorio el afrobeat, el latin funk y el afrofunk.

De la nación norteamericana —la mayor delegación al festival— también disfrutaremos de la propuesta de la banda The funky Taters, dedicada al trabajo musical en su versión más experimental, desde los tambores hasta instrumentos de percusión como el frottoir, el djembe, bongos, congas, cajón y claves o shekere.

Ted Nash es de los más esperados, saxofonista con una valiosa carrera como intérprete, director de orquesta y arreglista. Es miembro de la Jazz at Lincoln Center Orchestra y uno de los fundadores
del Colectivo de Compositores de Jazz.

El trombonista Steve Turre, quien además de ser catalogado como uno de los mejores virtuosos del instrumento, es reconocido por extraer un amplio rango de tonalidades de las conchas marinas, y el pianista Aaron Goldberg, uno de los intérpretes de jazz más brillantes de las últimas dos décadas, se suman a la lista de los bienvenidos al evento.

Resultará muy interesante asistir a las presentaciones de la arpista y compositora Patrice Fisher con su grupo, radicado en New Orleans, con una vasta discografía que muestra la complejidad atractiva de sus trabajos.

En nombre de Perú, Kiki Sánchez nos deleitará con su mezcla de estilos en el jazz, desde el soul hasta las sonoridades afro, lo que le ha valido nominaciones a los Premios Grammy en varias ocasiones, además de ser miembro votante de la Academia de esos galardones.

El pianista portugués Júlio Resende, con versatilidad probada en el jazz, el fado y el pop rock, trae una combinación entre la modernidad y lo clásico, sentando pautas fuera de su país, lo que le ha ganado ser de los artistas más internacionales de Portugal.

Con ascendencia haitiana y nacido en Canadá, Jowee Omicil muestra sus apropiaciones del aprendizaje a partir de la beca en el prestigioso Berklee College of Music en Boston, Estados Unidos.

Desde Brasil, tendremos al violonchelista Jaques Morelenbaum, con numerosos espectáculos y grabaciones en su repertorio, incluso merecedor de un Premio Grammy. En 1995 formó el Cuarteto Jobim-
Morelenbaum, con el que ha realizado varias giras nacionales
por Europa y Estados Unidos.

Arismar Do Espírito Santo también arriba desde el gigante suramericano para demostrar que además del contrabajo, domina la guitarra, el violín, el piano y la batería, con composiciones y arreglos armónicos inusitados.

Los músicos foráneos que llegan al Festival Jazz Plaza ofrecen  presentaciones exclusivas, irrepetibles, y que deben ser impostergables.

En el programa del evento aparece el cantante francés Jean Paul Tamayo, quien reúne experiencias en festivales en Suiza, Reino Unido y Bélgica, a la par de sus actuaciones como corista de varios cantantes de salsa de Nueva York y Puerto Rico durante giras por Europa.

Su coterráneo Simón Denizart, ganador del premio del público en el Festival Internacional de Jazz Rimouski y designado como Jazz
Revelation 2016/2017 por Radio-Canadá, prestigiará este Jazz Plaza.

Un placer contar con George Haslam, quien nacido en Reino Unido, es uno de los saxo barítonos más grandes del mundo. Sabemos que dirigió el primer grupo de jazz británico que tocó en Cuba en 1986 y el primer jazzman inglés que actuó en Argentina tres años después.

Justamente, desde ese país suramericano, tendremos la representación de la música originaria de esas tierras fusionadas con el jazz en la figura del bandoneonista Chango Spasiuk, con un depurado trabajo en la improvisación y la mixtura de géneros folclóricos y contemporáneos.

El guitarrista noruego Gaute Storsve ha desarrollado un loable trabajo en la mezcla de las sonoridades nórdicas y cubanas asociadas al jazz. Sus discos Attention: This is not a toy, for adult collectors
only (2017) y El gran Gotzilla (2022) han recibido excelente acogida del público y en especial, de la crítica.

Una de las propuestas llamativas que también llega del exterior al Jazz Plaza 2023 es el pianista alemán Florian Weber, quien después de cursar estudios en la Berklee College of Music en Boston, Estados Unidos, recibió un premio Echo Music al mejor instrumentista del año por piano y teclado y al año siguiente mereció el WDR Jazz Prize por improvisación de jazz.

Enhorabuena, uno de los fundadores de Les Tambours de Brazza, Fredy Massamba, regalará su arte en el evento. El congolés ha colaborado con Zap Mama, Didier Awadi y Manou Gallo, y es un consagrado en el panorama mundial con Ethnophony, su primer disco en solitario tras su nominación a los Premios Kora en 2012 en la categoría de Mejor Artista Masculino Centroafricano.

No deje de asistir a las presentaciones del cantante italiano Fabio Lepore, quien ha colaborado con numerosas orquestas sinfónicas y bandas en algunos de los teatros más reconocidos de, al menos, 50 países.

Desde México tendremos la dicha de disfrutar del pianista Emmanuel Nieves, director, compositor y arreglista del Grupo Guerrero Jazz y del Cuarteto Emmanuel Nieves Quart.

El baterista sudafricano Dan Chiorboli, integrante del grupo de percusión Interitmo y de la Brazilian Jazz Project del pianista Joen Delew, se suma al programa de los invitados extranjeros del evento, así como el holandés Bas van Lier, con trabajos musicales realizados con Ralph Peterson, Benny Bailey, Benjamín Herman, Jesse van Ruller, Candy Dulfer y Bennie Wallace.

Chad Lefkowitz-Brown, a quien el New York Daily News ha denominado “un fenómeno del saxofón”, también llega a Cuba. Chad LB ha realizado giras por todo el mundo como líder de una banda y con superestrellas que van desde Chris Botti hasta Taylor Swift. Ha sido un solista destacado con conjuntos de primer nivel como la Orquesta de Jazz de Juilliard, y la Orquesta de Jazz Afrolatino ganadora de varios Grammy.

Veeby, desde Camerún, trae sus potencialidades vocales para compartirlas en el evento. Es representante de las más ricas tradiciones de su país y ganadora de diversos premios en festivales de Canadá, Brasil, Costa de Marfil, Haití y Senegal.

Cubanos de nacimiento y de corazón son Arturo O´Farrill, Gina D´Soto, Axel Tosca, Carlos Sarduy, Irving Acao y Yilian Cañizares, quienes integran el cartel de los que, venidos de tierras foráneas, se unirán a los cubanos del patio para que usted “fluya jazz”.