Los derechos de Renata

Yunier Riquenes García
28/11/2017

Renata no alcanza a cumplir el primer año de vida, pero ya quisiera quejarse, demandar a sus propios padres. 

Como ella piensan Sebastián, David, Elena, y otros tantos… Las demandas vienen en camino por montones. A simple vista es evidente el fenómeno: los hijos demandarán a sus padres por poner toda su vida en la red.

No quedará vivo un misterio: la primera sonrisa, el primer paso, la primera meada, la mayor cantidad de pampers usados, la primera cicatriz, el primer gran dolor y la mayor alegría. Allí está todo en fotos y videos. Incluso puede afirmarse que el álbum de la vida fue público antes del nacimiento. Cómo crecía en la barriga, qué le decían, cómo reaccionaba ante los alimentos.

Renata y sus contemporáneos, antes de crecer, no han tenido derecho a guardar su intimidad, a publicar ellos mismos los recuerdos que les parezcan pertinentes. Sus padres no les regalaron esa posibilidad.

Se conocen varios casos de padres y madres que afirman entusiastas que ya sus hijos tendrán los álbumes más completos, y allí lo dejan todo grabado. Se cuenta que por esta vía de publicaciones en la red se han encontrado niños para la prostitución, que han secuestrado a otros.

Se cuentan también otro tipo de historias que pueden ser tan terribles como la primera. Los que nacieron primero que Renata y ya están en las escuelas sufren de las burlas y chantajes por las propias historias que montaron los padres.
 

Sebastián, David, Elena, demandarán a sus padres por poner toda su vida en la red. Foto: Internet
 

Se cuenta que Renata por ejemplo, antes de cumplir el primer año ya tiene más de 5 000 fotos y videos, los padres y abuelos compiten por poner en la red la foto más simpática, y la acompañan de atuendos, familiares, juguetes, y animales. Y la ponen allí, para que las familias puedan verla, de inmediato, al otro lado del mundo.

Cuando escribía este texto Renata seguía siendo el centro, la fotografiaban una vez más.  Renata quisiera decirles, les dirá algún día, avergonzada, su opinión al respecto.