Jorgito Melodía: Un músico cien por ciento cubano

Contribuir con el talento de orquestas jóvenes que defienden la cultura cubana y darles espacios y oportunidades, es una de las principales premisas de la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM), que recientemente cumplió sus 55 años. Jorge Greenidge Rosales —mejor conocido en la escena musical como Jorgito Melodía— es un fiel ejemplo de esos músicos con ganas de hacer y de crecer profesionalmente.

En mayo próximo sale al mercado su primer sencillo, “Prosperidad”, bajo el sello de esta casa discográfica. El álbum —que cuenta con diez temas, cinco de su autoría y el resto de destacados compositores cubanos, como Yamil Peralta, Raicel Abreu y Juan Ballesteros— está nominado a los premios Cubadisco 2019 en la categoría de Música Popular.

César Pupi Pedroso escribió la dedicatoria del CD, en donde asegura la calidad del fonograma. “Se aborda un compendio de géneros y formas de hacer la música popular cubana, con posibilidades tímbricas y rítmicas que inspiran al bailador, además de un tratamiento amplio de sonoridades expresivas basadas en nuestras raíces musicales”, cita el texto.

Jorgito Melodía cuenta a La Jiribilla cómo fueron sus primeros pasos en la música y la propuesta de su orquesta, cinco años después de creada.

¿Cómo llegas a la música?

Comencé desde muy pequeño, tocando piano con un profesor particular. No recuerdo ahora mismo el nombre, le decían “musiquita”, el primer violinista de la orquesta del ICRT. Después continué los estudios con una profesora de la Escuela Nacional de Arte, también en clases particulares; y luego entré en la escuela Alejando García Caturla, como clarinetista.

Al inicio fue un poco difícil porque ya venía estudiando piano. Solamente estaba disponible la plaza de clarinetista y la acepté pensando que después podía continuar con el piano o cambiar para otro instrumento dentro de la misma escuela. Nunca pude y terminé con el clarinete.

Comenzaron a hacer captaciones para un grupo de aficionados; aprobé y entré, siempre tocando el piano, gracias a los conocimientos que ya poseía. Hasta que un día a los integrantes de Ashé Junior —un grupo de muchachos que ahora casi todos están bien posicionados en varias orquestas de primer nivel en el país— les gustó mi voz y me propusieron cantar con ellos.

¿Cuál era la propuesta musical de Ashé Junior?

Este grupo proponía música popular bailable, por eso es que vengo en ese camino, desde los inicios me gustó mucho. La gente me decía: “¿tú tocas clarinete o vas a cantar?”; y yo les respondía: “quiero cantar, pero también quiero terminar mis estudios como clarinetista”. Al final me gradué como clarinetista, pero seguí mi carrera como cantante.

¿Y después de Ashé…?

Una vez que cumplo los 18 años comienzo con diferentes orquestas. Estuve tocando el clarinete y cantando al mismo tiempo con los nietos de Compay Segundo. También estuve en la agrupación Dan Den, con Pupi y los que Son Son y después con Adalberto Álvarez y su Son.

Hace aproximadamente cinco años decido hacer mi propio proyecto, a partir de un grupo de ideas que tenía, de mis deseos por componer y gracias a la ayuda de otros músicos muy buenos como Raicel Abreu.

¿Por qué Melodía?

Desde pequeño los vecinos siempre me llamaban por ese nombre. Vivo en un lugar donde se escucha todo el tiempo mi clarinete. A la hora de pensar en un nombre para el proyecto, salió la idea de Jorgito Melodía.

¿Qué imagen pretendes proyectar al mundo?

Primeramente, identidad propia, que todos vean que soy un tipo cien por ciento cubano y lo que defiendo es la cultura cubana, la música cubana, y por supuesto, el arte que hacemos nosotros, con estas características de música popular, que es de lo que va este disco.

Dentro de la música popular defendemos el son, tengo un poquito de todo: de Adalberto, con quien aprendí mucho, de Pupi… Esta forma de hacer se puede proyectar a través de un tema de este disco, que es bastante caribeño; propone una mezcla de timba con merengue y chachachá, con un resultado bastante movido. Defiendo la música cubana, salsa cubana o como le llamamos aquí, la timba.

¿Qué crees de la música popular que se está haciendo en Cuba?

Hay muchísimos artistas que están trabajando con excelente calidad. Creo que es muy válido darles fuerza, porque la música cubana es nuestra identidad. Cuba se ha caracterizado por tener excelentes exponentes de la música popular y la gente ahora está trabajando fuerte.

Quizás decayó hace un tiempo atrás, pero ahora creo que se está retomando, y sobre todo el público la está volviendo a aceptar y asimilar. Todavía no con la fuerza que debe tener, pero sí creo que está aumentando el consumo.

¿Cómo llegas a la EGREM?

Un amigo me dio la idea después de un año de haber concebido el proyecto. “Ya tienes un trabajo, un proyecto consolidado, necesitas un disco, que es una carta de presentación”, me dijo. La EGREM es la disquera de los músicos cubanos, hice la propuesta y me aceptaron, y estoy muy agradecido por eso.

¿Qué propone de diferente Prosperidad?

Este disco tiene varias características. Lo primero, dos invitadas: Vania Borges, con el tema “Amantes”, mezclado por Yamil Peralta; y Beatriz Márquez acompañándome en “No me podrás olvidar”. Esta última canción es una balada y es la primera vez que hago este estilo. Confieso que hay mucha gente que está un poco sorprendida, pero hasta ahora ha tenido la aceptación de las personas que la han escuchado.

Es un disco que está realizado con deseos de hacer buena música, respetando los parámetros establecidos, sin vulgaridades. Los artistas somos una especie de patrón a seguir por el público y siempre me atengo a eso. Creo que Prosperidad sería una interesante propuesta para ser escuchada.

¿Cuáles proyectos tienes en mente?

Este disco está recién terminado y lo primero que estamos haciendo es darle promoción para que el pueblo lo consuma y lo escuche. Después, tenemos varias propuestas de espacios para establecer peñas fijas, y ahí veremos el resultado del trabajo que hemos hecho. Queremos presentarnos en Santiago de Cuba, en el Teatro Heredia y en los Carnavales. Tenemos fechas en Bayamo, Guantánamo y Las Tunas.

Jorgito Melodía es de esos músicos que han tomado la difícil travesía de hacer una carrera en solitario. Aún le quedan muchas cosas por realizar y espacios por tomar; pero su empeño, sus ganas de hacer y la ayuda de la EGREM, le garantizarán “prosperidad” en la música popular.