Jorge Alfonso sobre HB: “Un proyecto incluyente y plural que da a conocer una parte del arte contemporáneo en Cuba”

Cinco galerías de la capital (Acacia, La Nave, Servando, Habana y el Edificio Sarrá) abrieron sus puertas paralelamente este martes para inaugurar la quinta edición de HB. Muestra de Arte Cubano Contemporáneo: un espacio en el que confluyen obras de diversas expresiones y técnicas, artistas de distintas generaciones y formaciones, así como creadores residentes en Cuba y en el extranjero con realidades y miradas diferentes a su entorno social.

“Es una idea que surge paralela a la Bienal de La Habana, específicamente en la de 2009. Queríamos dar una visión del arte contemporáneo cubano y sus posibilidades de mercado”, comentó a La Jiribilla Jorge Alfonso, director de la empresa Génesis, Galerías de Arte. De esta manera, a la par del evento de mayor envergadura de las artes plásticas en Cuba, se realizó HB en las últimas cuatro bienales (2009, 2012, 2015 y 2019).

“Queríamos que el proyecto tuviera una vida propia, que se pudiera realizar paralelo a la bienal, o sin ella. La idea es tomar el proyecto, regularizarlo y poder ofrecer una panorámica lo más amplia, inclusiva y diversa posible del arte contemporáneo cubano actual. Para ello, utilizamos nuestra infraestructura, las galerías que integran Génesis, en colaboración con la Oficina del Historiador de la Ciudad”, explicó. 

HB, insistió Alfonso, no es el arte contemporáneo cubano en su totalidad, sino una muestra en la que confluyen diferentes artistas, formaciones, expresiones y técnicas. “En esta ocasión, como particularidad, confluyen diferentes generaciones. Hasta la edición cuarta de HB no había una presencia significativa de jóvenes”.

No tuvimos en cuenta un criterio curatorial a partir de una idea en específico, agregó, sino que fue por un concepto etario.

Los artistas emergentes de la muestra exponen en la Galería La Nave y el Edificio Sarrá; algunos incluso transitan aun por los diferentes niveles de la enseñanza artística. “Hay creadores que tienen una carrera media de entre 30 y 40 años, otros entre 40 y 60, y la generación de los 70’ y 80’, en la que se incluyen algunos Premios Nacionales de Artes Plásticas”, dijo el director de Génesis, Galerías de Arte sobre la composición de los creadores que forman parte de la quinta edición de HB. 

No tuvimos en cuenta un criterio curatorial a partir de una idea en específico, agregó, sino que fue por un concepto etario. “O sea, partimos de una unidad conceptual que es HB─ un proyecto incluyente, plural, que da a conocer el comportamiento de una parte del arte contemporáneo en Cuba, cómo va, cuáles son sus posibilidades y potencialidades─ pero nos dimos cuenta de que cada proyecto tenía una dinámica propia; el resultado fue cinco exposiciones totalmente diferentes”.

Es importante tener un evento como este, añadió Jorge Alonso, con un criterio curatorial, museográfico y de producción en cada exposición.

En esta misma línea, el director de Génesis explicó que los jóvenes tienen su forma de ver la realidad y su entorno, así como maneras distintas de trasmitirla con sus obras, al igual que los artistas consagrados, pero eso no impide que puedan dialogar entre ellos porque no es una exposición que conceptualmente divide estilos o expresiones artísticas. 

Es importante tener un evento como este, añadió Jorge Alonso, con un criterio curatorial, museográfico y de producción en cada exposición. “Este espacio permite que el público pueda venir y que los artistas tengan un espacio para exponer”.

Según el directivo, los organizadores están satisfechos con lograr un evento de este tipo en el tiempo en el que se hizo porque demostró que nada es imposible. “Somos un país que tiene que luchar contra la adversidad y aun así se pueden concebir cosas de calidad, bien hechas, que unan, porque muchos de los artistas que integran la muestra residen en el exterior”.

El sistema de enseñanza artística y el proceso creativo de formación tributan a la salud del arte contemporáneo cubano.

Jorge Alonso dijo que no cree en las vitrinas, que lo importante es que HB se mantenga con el mismo estándar de calidad, con un criterio curatorial riguroso, como cualquier hecho artístico. “No podemos ceder en eso; lo importante es tener la obra”. 

Sobre la salud del arte contemporáneo de Cuba, mencionó el sistema de enseñanza artística y ese proceso creativo de formación que permite retroalimentar el escenario creativo en el país. “Tenemos que estimular ese proceso artístico, darle visibilidad, apoyar su crecimiento, internacionalizar la empresa y volver a conectarnos con el sistema de ferias de arte y de proyectos en el exterior. Hay grandes desafíos por delante”, concluyó.