Instituto Cubano de la Música denuncia hostigamiento a grupo Buena Fe

El Instituto Cubano de la Música (ICM) denunció en la mañana de hoy el hostigamiento y las campañas mediáticas orquestadas durante los últimos días contra el grupo Buena Fe, tras su gira por Europa.

En el inicio de la conferencia de prensa, efectuada en la sede de la institución cultural, su presidenta Indira Fajardo, ofreció información sobre el boicot, el acoso y las amenazas contra los artistas y la suspensión de sus conciertos organizados en Salamanca y Zamora, España.

El pasado 12 de mayo, la agrupación cubana realizó un concierto en la sala Galileo Galilei de Madrid, con una gran acogida del público presente. A decir de Fajardo, “en ese mismo escenario se suscitó una lamentable provocación, lo que tuvo un rechazo del público asistente. Esta provocación estaba concebida de antemano, así lo demostraron en las redes sociales los propios odiadores”.

En su perfil de Facebook, Israel Rojas, líder de la agrupación comentaba sobre lo sucedido: “Llevaban varios días anunciando en redes sociales sus intenciones de boicotear un concierto totalmente legal. En un lugar habilitado para ello, en el que hemos tocado desde el año 2006 con regularidad. La intención es provocar un incidente. Dar alimento informativo a la maquinaria de odio mediático. Alejarnos del público que gusta de nuestra música. Ahora atacan a la Sala Galileo Galilei, amenazan con demandar y tratan de culparme por lo sucedido, cuando yo no supe nada de lo que pasó ya que estaba en el escenario. Todo sucedió en menos de 10 segundos y el público reaccionó pidiendo la expulsión de los que intentaban hacer de nuestro concierto, un asunto de otro carácter para su conveniencia. El concierto fue maravilloso. Y agradezco a los que fueron y no se dejaron provocar. Eso es lo importante.  No hubo boicot alguno. Hubo amor, música y alegría”.

Tres días después del incidente, que en varios medios de prensa y redes sociales intentaron hiperbolizar, Buena Fe anunciaba la suspensión de sus conciertos en Salamanca y Zamora, y comentaba: “bajo el pretexto de defensa de la democracia se han desatado acosos y amenazas fascistas contra los dueños de los locales y eso ha podido más que las canciones”. Lo ocurrido atenta contra el disfrute pleno de una parte de la comunidad cubana residente en Europa y del público en general, ávido de escuchar y conocer también la obra musical de la agrupación.

Ese mismo día, el dúo cubano recibió muestras de agradecimiento por su arte y en defensa de su obra. El reconocido trovador cubano Silvio Rodríguez reflexionaba en sus redes: “Por lo visto los acosadores de Buena Fe no se molestan en escuchar sus canciones. ¿Será que no les conviene conocer las preguntas indóciles que el dúo lanza al aire, tema tras tema, aquí, en suelo cubano? ¿Será que algunos hacen uso de un respetable derecho a irse, pero no pueden soportar a los que se queden a luchar por un país mejor? ¿Será por vergüenza de ellos mismos los que piden invasiones y bloqueos contra su propio pueblo? Insoportable para algunos el ejemplo moral de Buena Fe. Es comprensible”.

Por su parte, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) se pronunció con indignación ante la persecución mediática a Buena Fe y a los empresarios y promotores españoles, comprometidos con su gira por varias ciudades del país europeo. “Se trata de un atentado contra la civilidad, de un manifiesto desprecio a la cultura y a quienes defendemos el derecho a hacer nuestra obra desde esta Isla bloqueada y calumniada”. En tanto se expresaba la solidaridad con el dúo cubano y su líder Israel Rojas, integrante del Consejo Nacional de la organización. En el pronunciamiento los miembros de la Uneac agradecían “a los tantísimos españoles y compatriotas residentes en España y otras partes del mundo que los han apoyado y se han pronunciado contra esta injusticia porque, como nosotros, creen en el poder de la poesía, de la canción y de la cultura como plataformas para el crecimiento espiritual y el entendimiento humano”.

Recientemente, Buena Fe concluyó una exitosa gira por toda Cuba y fue merecedor de un Premio Cubadisco en la finalizada edición por su último disco Morada. Como reconoció la presidenta del ICM en conferencia de prensa, la agrupación lleva más de veinte años en la preferencia del público cubano, y de los jóvenes cubanos. “Por ello no es inocente este ataque específicamente a Buena Fe. Por eso denunciamos desde el ICM ese hostigamiento, ese boicot hacia los conciertos, la presión que se ha ejercido sobre el público asistente a los conciertos, y a esos programadores locales que han sido víctimas de las acusaciones, incluso hasta de amenazas para lograr el cierre de los locales. En muchas ocasiones, estos programadores sin tener muchos recursos económicos siguen apostando por la música cubana, por defender y ayudar a promover nuestra música y a nuestros artistas en el exterior”.

De igual modo, Fajardo resaltó el sostenimiento de las relaciones con artistas cubanos residentes en el exterior: “hemos visto a lo largo de estos años la presencia de muchos en nuestros festivales internacionales: Jazz Plaza, Cubadisco, Havana World Music, entre otros. Existen vínculos también para potenciar la enseñanza artística”.

En anteriores ocasiones, varios músicos y artistas cubanos han sido víctimas de ataques mediáticos, tal es el caso de Van Van, Alexander Abreu, Pedrito Calvo, Haila, Paulito FG, entre otros. En ese sentido, Indira comentó: “Acciones como estas no pueden quedar impunes, por eso hacemos este llamado a la comunidad internacional a denunciar lo ocurrido. Es nuestro derecho existir y promover nuestra cultura en el exterior y no estar bloqueados culturalmente”.

Estas prácticas de hostigamiento impactan en el normal desarrollo de dinámicas y procesos de intercambio cultural de artistas cubanos en escenarios internacionales. A decir de la titular: “Impactan de manera muy negativa, porque justamente lo que está buscando es fracturar esa presencia de la cultura cubana en el exterior. Esto constituye más allá del bloqueo económico contra Cuba, también un bloqueo cultural que llega ya no solo hasta los artistas, sino también a los programadores y empresarios, con quienes hemos mantenido una relación bastante estable, pero estas medidas y prácticas pretenden que se corte esa relación de visibilidad y de promoción de la música, de la cultura cubana en el exterior”.