El lente del fotógrafo andaluz Juan Miguel Morales, siempre atento a la cultura musical que nos une, no perdió nota, acorde e imagen de lo que aconteció el domingo 26 de septiembre al anochecer en la plaza del Parque Central de Nous Barris, Barcelona: el concierto dedicado a los pobladores de la urbe mediterránea por el pianista y compositor José María Vitier, portador de un mensaje cultural de hermandad desde La Habana.
Fue un momento culminante en la agenda de la Fiesta de la Mercé, tradicional celebración espiritual barcelonesa, consagrada en esta oportunidad a resaltar los vínculos entre la capital cubana y Barcelona.
En las palabras de presentación del concierto, Silvia Rodríguez Rivero apuntó:
Hemos seleccionado para este concierto de hermandad entre dos hermosas ciudades muy queridas, La Habana y Barcelona, un conjunto de obras para piano y orquesta del reconocido compositor y pianista cubano José María Vitier. En este repertorio se recrean diversos géneros de la música cubana como la habanera, la danza, la contradanza, el son y el danzón así como otras piezas en las que el autor dirige su acento hacia la fusión con las raíces afrocubanas. Músicas de genuino lirismo, pleno y desprejuiciado, capaz de sorprendernos, no solo por la emoción contenida en la belleza melódica de sus obras, sino también por el empleo de recursos afines a la contemporaneidad.
“Fue un momento culminante en la agenda de la Fiesta de la Mercé”.
Para tan emotiva entrega, en la que mucho tuvo que ver el buen oficio y la sensibilidad el promotor catalán Yanni Minujos, Vitier invitó al pianista Marcos Madrigal para que asumiera el estreno mundial del tercer movimiento del Concierto para piano y orquesta, obra que enriquece el notable catálogo viteriano y cuya audición completa en Cuba es anhelada por los tantísimos seguidores de quien es uno de nuestros más respetados compositores.
El diario La Vanguardia resumió así la jornada:
Último concierto de la Mercé con triple lazo conceptual adornándolo. Por un lado la descentralización, el concierto tuvo lugar en la plaza mayor de Nou Barris, por otro el contenido social, fue interpretado por la sinfónica del proyecto Vozes, que fomenta la integración social de los jóvenes a través de la música, y finalmente estaba dedicado a celebrar los 500 años de La Habana, cumplidos hace dos, por medio de una obra encargada a José María Vitier, pianista y compositor cubano presente en el estreno de esta obra en una Mercé que ha homenajeado a la capital cubana. Como remate, María del Mar Bonet figuró como invitada en algunas de las composiciones de una obra que plantea un paseo por la historia de la música de la Isla caribeña. La presencia de la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, sancionó las ideas de fondo de un concierto con marcado acento social, de hermanamiento cultural y de barrio.
Juan Miguel Morales, con puntualidad meridiana y sensibilidad a toda prueba, captó a los protagonistas del concierto en imágenes que hemos querido compartir con los lectores de La Jiribilla.