Sencilla, vital, colorida en el físico, los gestos y los sentimientos. Así se presentó la renombrada artista de la plástica Flora Fong en la XXIV edición de la Fiesta de la Cubanía, en la capital de la oriental provincia de Granma. Flora prestigia el espacio y comparte anécdotas personales mientras desentraña caracteres y conceptos, ya que, según dice, “es muy bueno que una misma pueda hablar de su trabajo y explicarlo”.

Comunicativa y accesible, ella cumple esa finalidad de la forma más bella posible, deleitando al público local con la exposición personal Ciclones en el tiempo, y con la presentación de la multimedia Insularidad, paisaje y sincretismo cultural, un interesante acercamiento a su vida y a rica trayectoria artística.

“La cubanidad es un propósito que he logrado a través de toda mi obra, donde aparecen el mar, el entorno caribeño, la plataforma insular y nuestro sol.Ya siento consolidada esa aspiración, por eso este era el momento de venir a Bayamo. ¡Viva la Fiesta de la Cubanía!”, expresó.

En la legendaria urbe, donde el 20 de octubre de 1868, hace 150 años, acontecieron los hechos que definirían esta fecha como el Día de la Cultura Cubana, Flora manifestó que el ideal de cubanía forma parte de la conciencia colectiva: “Dentro de ese ideal nos encontramos los artistas, y yo, desde la plástica, con mi forma de pintar, me siento feliz y también muy cubana. Es algo que comienzas a entender desde tus primeros pasos, cuando al entrar a la escuela sientes el respeto hacia el Himno Nacional y la bandera”.

Junto a esta profunda convicción, resaltó que sus piezas reflejan el gran significado de poder plasmar una obra a través de lo caribeño,con la recurrente presencia de la plataforma insular.

En atractivo diálogo, la artista explicó cómo se ha sedimentado la cultura china en su trabajo. “Por medio de la caligrafía me he apropiado de un discurso mucho más organizado, como un homenaje a mis ancestros”.

A pesar de su formación occidental —inicialmente en la academia de su natal Camagüey, y luego en la Escuela Nacional de Arte—, sentía la deuda de lo asiático, y decidió que tenía algo que aportar en ese sentido. De esa forma, el deseo de apropiarse de valores importantes y básicos la obligó a estudiar la cultura china de paisaje, y más tarde pudo vincular su esencia a lo que se estaba haciendo en Cuba.

A partir de entonces, resaltó que ha sido un propósito constante en su creación el organizar las ideas teniendo dos puntos de apoyo: lo oriental y lo caribeño. Todo lo relacionado con la herencia familiar y el acercamiento a sus parientes chinos comenzó como una idea que requirió de ella esfuerzo y dedicación, y aunque hoy está siempre presente, “todavía me resta mucho por hacer”,agregó.

Sobre su proyecto más reciente, El Caribe Ming: imagen, caligrafía y verso, la artista comentó que incluirá un cuadro sobre el huracán Irma, soportado en un antiguo carácter chino que significa castigo, ya que el paso de ese evento meteorológico fue realmente un castigo para Cuba.

Acreedora de la Distinción por la Cultura Nacional, Flora Fong es una de las artistas cubanas más consolidadas. Además de la pintura y el dibujo, ha incursionado en la escultura, la cerámica, el vitral y el diseño en telas. Supera la veintena de exposiciones personales y ha participado en más de 80 muestras colectivas en Cuba, España, Holanda, China, Corea del Sur, Francia, Portugal, Estados Unidos, Suiza, Italia, Chile, Japón y otros países.