Fallece en La Habana el Caballero del Son
En la madrugada de hoy falleció en La Habana, por una disfunción múltiple de órganos, a consecuencia de una neumonía derivada de la COVID-19, el Maestro Adalberto Cecilio Álvarez Zayas, compositor, arreglista, pianista y director de orquesta, quien fundara en 1978 la orquesta Son 14 y, en 1984, Adalberto Álvarez y su Son; dos formaciones imprescindibles en la historia de la música popular cubana.
Nacido en La Habana el 22 de noviembre de 1948, Adalberto Álvarez siempre se consideró natural de Camagüey, ciudad donde vivió sus primeros años, comenzó su carrera profesional y mereció la condición de Hijo Ilustre; con la cual mantuvo permanentes vínculos y desarrolló numerosos proyectos para la promoción de la música.
Este gran compositor y orquestador cubano, que se mantuvo durante más de cuatro décadas en la preferencia del público bailador, es autor de varios temas considerados clásicos del repertorio popular nacional. Diversas obras de su autoría han sido interpretadas por grandes figuras internacionales de la música bailable.
Representó a Cuba en disímiles festivales y escenarios nacionales e internacionales, en los que siempre defendió el Son cubano, pasión que le retribuyeron sus colegas y espectadores al llamarlo el Caballero del Son. Fue el principal animador de los trabajos para declarar el Día del Son en Cuba, celebrado por vez primera el pasado 8 de mayo.
“Con la partida física de este gran creador, la música popular cubana pierde a uno de sus más genuinos exponentes y el público bailador a uno de sus artistas más queridos”.
Ganador del Premio Nacional de Música en 2008, fue acreedor también de la Distinción por la Cultura Nacional y la Orden Félix Varela y recibió en varias ocasiones el Premio Cubadisco, entre otras distinciones que expresan la calidad y el carácter renovador de su prolífica obra. Electo por el municipio Camagüey, fue diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular entre el 2013 y 2018. Con la partida física de este gran creador, la música popular cubana pierde a uno de sus más genuinos exponentes y el público bailador a uno de sus artistas más queridos.
Por decisión familiar, su cadáver será velado en ceremonia íntima.
En nombre del Instituto Cubano de la Música y del Ministerio de Cultura, llegue a familiares, amigos y seguidores de su obra nuestras más sentidas condolencias.