Exposición fotográfica Fragmentos épicos inició recorrido en Santiago de Cuba

Fragmentos épicos se titula la exposición colectiva de fotógrafos cubanos abierta al público en el Centro Provincial de Artes Plásticas y Diseño de la ciudad de Santiago de Cuba, hasta el próximo 30 de julio, en saludo al aniversario 66 del asalto a los cuarteles Moncada, de la propia localidad, y Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo.

Las 44 obras que comprende, dos con carácter simbólico, son de la autoría de Alberto Díaz Gutiérrez (Korda), Antonio Eligio Fernández (Tonel), Eduardo Ponjuán González, Ernesto Fernández Nogueras, Nadal Antelmo Vizcaíno, Roberto Salas, Osvaldo Salas, Raúl Corrales Fornos, Roberto Chile Pérez y Cirenaica Moreira Díaz.

Con carácter itinerante, la muestra podrá ser vista luego en las provincias de Guantánamo y Granma, esta última merecedora de la sede del acto central por el Día de la Rebeldía Nacional.

Grettel Arrate, directora del Centro Provincial de Artes Plásticas y Diseño, puntualizó que las imágenes expuestas corresponden a los fondos del Consejo Nacional de Artes Plásticas y convocan a una lectura de los momentos de la Revolución Cubana a través de fotógrafos del país.

Algunos de estos fotógrafos, dijo, tuvieron el privilegio de haber vivido el triunfo del Primero de Enero con el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz al frente, y supieron reflejar la trayectoria del líder histórico y su proyección en la política nacional e internacional. Fue una etapa en la cual la fotografía se erigió como medio por excelencia para captar la nueva realidad y expresar los constantes cambios protagonizados por sus líderes y las masas obreras y campesinas.

Del reconocido fotógrafo y periodista, Korda, cronista gráfico de la Revolución, aparece “Primer viaje de Fidel a la URSS” (abril 1963), mientras de otros consagrados del lente en esa etapa están “Caballería” (1960), de Raúl Corrales; “Tres hermanos” (1963), de Osvaldo Salas y “Fidel y Che” (1964), de Roberto Salas.

Las de carácter simbólico son de Antonio Eligio Fernández, “Constructivo”, consiste en un bloque de hormigón que muestra la bandera cubana, y la escultura “Hundido en la línea del horizonte” de Eduardo Ponjuán. Ambos son graduados de Historia del Arte en la Universidad de La Habana, en los primeros años de la década del 80.

En la exposición, diferentes generaciones de artistas establecen una estructura narrativa que emana del carácter épico de los acontecimientos, de ahí el nombre. Se inspiran en el relato de las luchas y la presencia de los héroes que encarnan los valores de la nación y la cultura.