El XIX Salón Internacional de Humorismo Gráfico Santa Clara 2019 quedó inaugurado en esa ciudad del centro de Cuba el 20 de diciembre último, con los premios que reconocieron el talento, la creatividad y la capacidad no solo de hacer reír, sino también de mover al pensamiento de dibujantes que esta vez implantaron récord de participación: unos 130 de más de 30 países. Hay quien dice que el que llega a Santa Clara es el humor más dulce del mundo.

Surgido como conmemoración de la aparición, exactamente un 20 de diciembre de 1968, del suplemento humorístico Melaíto en el periódico Vanguardia —que nacía para apoyar la Zafra de los 10 millones—, el certamen que combina la gráfica y la risa deviene referencia para artistas que quieren saberse presentes desde los rincones más impensados: Turquía e Irán, por ejemplo, de conjunto con Cuba, se erigieron como las naciones más representadas. Aun así, hubo trabajos desde Kirguistán o Bosnia y Herzegovina; de China y Marruecos; y de Colombia, Estados Unidos o Brasil, por solo mencionar algunos.

Al inicio de las celebraciones por los 51 años de Melaíto y los 19 del Salón, Alfredo Martirena, uno de los miembros del suplemento, explicaba que este diciembre se dedicaban las jornadas especialmente a Pedro Méndez, suerte de homenaje que lo honraba como el gran dibujante que es y también como director fundador de la ya mencionada publicación.

Méndez dejó inaugurada la muestra Pedro el Grande, resumen de sus últimos trabajos que abarcaron el humor general y el erótico. Se ganó igualmente el apelativo de capitán de los humoristas, dado por el caricaturista mexicano Arturo Kemchs, dibujante del diario El Universal.

Durante tres días se sucedieron exposiciones; se habilitó, dentro de la página de Facebook de Vanguardia, el grupo Melaíto; así como también una versión móvil de su web, accesible en la dirección www.vanguardia.cu/melaito, que creció en seguidores y calidad visual.

Marelys Concepción Díaz, directora del semanario villaclareño, decía entonces que este había sido un año de intenso trabajo, donde uno de los principales logros recayó en el rescate de los colaboradores del suplemento, entre ellos Javier Cubero Torres (Javier), Ramón Díaz Yanes (Mongo), Abraham Fedor Águila Olmo (Feddor), Ricardo Reyes Ramos (Richar), Ernesto Rodríguez Castro (Beli) y Osvaldo Gutiérrez Gómez (Osval).

Hemos conseguido también que desde la web haya crecido el número de entradas a las obras creativas del equipo, agregaba Concepción Díaz, liderado por Pedro Méndez Suárez (Pedro), Rolando González Reyes (Roland), Alfredo Martirena Hernández (Martirena) y Félix Adalberto Linares Díaz (Linares).

Hasta la fecha suman más de 400 los miembros del grupo en redes sociales, en una vorágine de contenidos que se ha hecho notar en los últimos días.

Un mérito, dicho sea de paso, del “evento de Melaíto” —como casi todos llaman al Salón—, al que precisamente Arturo Kemchs ha calificado como uno de los más importantes del orbe, no solo de América Latina, avalado por el alto nivel de participación tanto en cantidad de obras enviadas como en la calidad de las mismas, lo cual le confiere a la cita fuerza y jerarquía dentro de los concursos internacionales de este tipo.

He tenido la oportunidad de fungir como jurado permanente en varios países, añadía el también historietista, por eso sé que estamos ante un encuentro respetable y donde los caricaturistas quieren participar.

Para el próximo enero el público todavía estará a tiempo de disfrutar las obras del salón en la Arche Galería de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba en Villa Clara, que coauspicia el certamen. En sus paredes, sobresalen las obras Fuera del área de cobertura, de Reinaldo Hernández Valera; y el conjunto de trabajos de Michel Moro Gómez, ambos de Cuba, primeros premios en las categorías de humor general y erótico, respectivamente.

Siguiendo la línea del humor general, mereció el segundo galardón Paciente grave, del cubano Brady Izquierdo Rodríguez; mientras el tercer puesto lo ocupó Políticos, de David Hafez, de Estados Unidos; y las menciones fueron para Tercer planeta, de Ricardo Reyes Ramos; Violencia contra la mujer, de Nahid Zamani, de Irán; y la obra sin título de Sergey Sichenko, de Ucrania.

Pero si la preferencia se va por el humor erótico, las sugerencias seguirían con Puestos, de Osvaldo Gutiérrez Gómez, segundo lugar en este acápite; el conjunto de Raúl Fernández Zuleta, de Colombia, que alcanzaba el tercero; Tentación, de Guto Respi, de Brasil, y Espermaticidio, de Ismael Lema Águila, de Cuba, que se llevaban las menciones.

Por el “evento de Melaíto” es que Michel Moro Gómez incursiona cada año en la modalidad de humor erótico: ahí está la importancia del Salón, dice, en su capacidad para inspirar temáticas y acaricaturistas.