Ubicado frente al malecón habanero, el Centro Hispanoamericano de Cultura es una de las instituciones que se integra al plan de actividades culturales de la Oficina del Historiador de la Ciudad, como parte de la programación de la XIII Bienal de La Habana.

Por su ubicación —según su nombre lo indica—, el constante empeño de la importante institución se concentra en promover, no solo las manifestaciones del arte, la cultura y el pensamiento, sino también las oportunidades arquitectónicas de la instalación.

En la sala Cernuda se encuentran expuestas las obras de la artista brasileña Lais Myrrha, el costarricense Oscar Figueroa y el cubano Alejandro Campins. La exposición, en conjunto, representa una mirada sobre lo espacios intervenidos por el hombre, dígase vivienda o entornos naturales, olvidados acaso, tanto por correlatos, como por el dircurso imperante de una historia mayor.

Esta exposición confirma varias disposiciones constantes, desde las cuales se manejan temáticas que van desde la infuencia del paso del tiempo en el paisaje natural (“Malpais”. De la serie Badlands, de Alejandro Campins), hasta la evocación del dolor, silenciado por una modernidad tan deseada como preocupante en Latinoamérica, por cuanto de industrialización y costo humano acarraeó (On the Other Side of the Railroads, de Oscar Figueroa), pasando también por (Breve cronografia dos desmanches, de Lais Myrrha), donde localizamos la pluralidad de visiones de la ciudad y el paso del tiempo sobre ella, los lugares abandonados y la configuración de un nuevo mapa de la urbe.

Las obras incluidas en esta muestra aseguran que la ciudad, en constante diálogo con lo humano, proyecta las preocupaciones de los artistas por exponer sus criterios acerca de la naturaleza histórica del hombre.