Las voces que mueren no pueden responder por ti
Una casta de intrépidos vela por nosotros
prestan su poder a un pueblo irredento
en un mundo infiel
haciendo gala de su renunciación
Vientos y arenas los cubren
bajo el cielo tormentoso
estremecedores momentos
que la mente no puede borrar
Vanagloriándose de sus heridas
muestran sus cicatrices
y pregonan su agonía
haciendo sonar sus cadenas
tan ruidosamente culpables
Hasta que se desmoronan
como ultrajadas estatuas
de la cima a la hoguera
y de la luz grata que reconcilia y fortalece
a su disolución nunca gloriosa en las tinieblas de la nada
¿Podríamos preguntar por ellos todavía?
¿Y desenterrar jardines y columnas ahora truncas que jamás nos sostuvieron?
*A la memoria de la poeta Heba Aba Nada, muerta en Gaza bajo un bombardeo, el 20 de octubre de 2023