El Festival del Caribe se miró a sí mismo cuando dejó inaugurada en la galería Oriente la muestra Mágica ciudad; cuarenta piezas de gran formato de la reconocida artista plástica Gretel Arrate Hechavarría, con Yuri Seoane como artista invitado. Se trata del Caribe recortado por un instante contra la catedral, detenido como un fragmento en el asfalto. A cuentas, a gotas, a fuego.
Vengo a contar la historia de cada julio, del candente metal contra mi carne, la sangre subterránea, el abalorio de mi desnudez. Vengo a mirar la mirada del otro: el filo está en mi lengua y nada temo. Vengo a danzar la vida de mis loas. A poner mano sobre mano, la brea contra el ataval, la semilla que parió la selva que cruza mi pecho descubierto, el ojo de cristal empapado en alcohol.
Festival del Caribe, cuarenta años de diásporas, de encuentros. Desfila la serpiente en el mismísimo corazón de Santiago de Cuba, en Santiago del mundo, en Santiago de apóstoles, de repiques, de soles.
Tengo la mano asida al lente. Tengo el cobalto estrellado en mi frente. Tengo el hacha, la luz, y si la toco, la ciudad explota.
“Mis bailes son contra el odio”.
Mirad bien el rostro delante de mi cámara, debajo de mis máscaras. Mis plumas desafían lanzas; mis bailes son contra el odio.
Mirad bien estas chispas cómo arden, estas chispas del diablo. Cómo el tizón atiza contra el cielo. Cómo sostengo la olla que me sostiene. Cómo ennegrezco, cómo enrojezco, cómo soleo.
Yo soy el caracol, yo soy la espuma. La muerte en cueros, la sagrada rama, la cobija. Soy la uña, el aire y el rumor suspendido. Soy un signo en la tierra. Yo soy Santiago. Una ciudad a cuentas, a gotas, a fuego. Os la presento.