Fidel, lector visionario que soñó y diseñó esta Feria, estará siempre con nosotros
Discurso pronunciado por Juan Rodríguez Cabrera, Presidente del Instituto Cubano del Libro y del Comité Organizador de la 27 Feria Internacional del Libro, Cuba 2018.
El acto fue presidido por los miembros del Buró Político del Partido Comunista de Cuba Esteban Lazo Hernández, Miguel Díaz-Canel Bermúdez y Mercedes López Acea; el Ministro de Cultura de Cuba, Abel Prieto Jiménez; el Presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y miembro del Consejo de Estado, Miguel Barnet Lanza, y el Director de la Oficina del Historiador de La Habana, Doctor Eusebio Leal Spengler, autor a quien se dedicada la presente edición de esta fiesta del libro y la lectura.
El País Invitado de Honor, estuvo representado por el Señor Zhou Huilin, Viceministro de la Administración Estatal de Prensa, Publicación, Radio, Cine y Televisión y Viceministro de Administración Nacional de Derechos de Autor de China, acompañado por la delegación que lo acompaña y por varios representantes de su embajada en La Habana.
Asistieron también a la ceremonia los invitados extranjeros Vilma Alanoca Mamani, Ministra de Cultura y Turismo de Bolivia y Ernesto Villegas Poljak, Ministro de Cultura de la República Bolivariana de Venezuela; así como integrantes del cuerpo diplomático acreditado en Cuba y otros dirigentes, escritores, editores, gestores culturales y trabajadores del libro, cubanos y extranjeros.
Dirigentes e intelectuales de Cuba y de los 41 países participantes en este evento:
Mientras en muchos lugares del mundo se ha perdido la esperanza de que los pueblos lean, en nuestro país se cree en el papel edificante de la lectura. Esta Feria es elocuente prueba de la importancia que el Estado confiere al libro, la lectura y a eventos como este, en un contexto mundial donde cada vez se entroniza, del peor modo, esa seudo cultura global, que niega raíces nacionales y valores patrios.
A pocas horas de haber pasado el huracán Irma por Cuba, la Dirección del Estado Cubano, hizo patente su decisión de llevar adelante esta fiesta del libro y la literatura, que un lector, de la talla de Fidel, pensó para el pueblo y con el pueblo.
Una de las primeras prioridades de la Revolución fue la educación y el fomento de la cultura literaria y científica, materializada en una Campaña de Alfabetización que en 1961 proclamó a Cuba territorio libre de analfabetismo y luego tuvo expresión viva en múltiples programas educativos y por la lectura. Aquellas batallas por el futuro de Cuba, desempeñaron un decisivo papel en el desarrollo lector de nuestro pueblo, el que hoy exhibe un alto nivel cultural, capaz de asumir el reto de desarrollar un país que otrora fue una dependencia colonial, como todos nuestros hermanos de América.
La vigesimoséptima Feria Internacional del Libro de La Habana tiene a la República Popular China como País Invitado de Honor. El hermano país acude a La Habana con el potencial de su cultura milenaria, cuna de grandes pensadores que con sus ideas y aportes renovaron el mundo.
En China se originó el papel, la tinta y el primer sistema de impresión a base de piezas de porcelana. Hoy es uno de los mayores productores en esta industria a nivel mundial; ostenta asimismo, un enorme desarrollo editorial, que promueve a grandes autores, nacionales o extranjeros, clásicos o contemporáneos. Cuba da la más calurosa bienvenida a la amplia y representativa delegación de la hermana República Popular China en esta fiesta de las letras y las artes.
La labor conjunta desplegada por nuestros dos países en la preparación de este evento, hará posible que podamos contar, a partir de hoy, con lo mejor del quehacer cultural de esta nación, difundiendo sus valores y el pensamiento de los grandes hombres y mujeres, que a lo largo de miles de años, marcaron con sus obras, el desarrollo de una de las más grandes naciones del mundo, no solo por su extensión territorial, sino también por sus aportes a la evolución de la humanidad.
Otro gran lector, nacido desde su constante deseo de superación en una cuna humilde, donde poseer un libro siempre fue un lujo, es el Doctor Eusebio Leal Spengler, autor al que se dedica este año la Feria Internacional del Libro. Leal a la mejor expresión de la cultura cubana y sus tradiciones, nuestro querido Eusebio, figura amada por el pueblo gracias a su poder comunicativo, entrega a las mejores causas de su Patria, y esa sapiencia sin límites que a todos alumbra, es un gran defensor del patrimonio nacional, incluso de ese patrimonio intangible, que guarda las ideas y los mejores sentimientos y sueños de los seres humanos. No se trata solo de un conservador, un guardador del pasado, sino de un asegurador del presente y del futuro. ¿Qué más garantía para el porvenir de la nación que conservar lo mejor de su legado histórico?
Ejemplo de intelectual revolucionario, él es una de las figuras cimeras de la cultura cubana y gran defensor del buen libro y su papel formador de un ser humano mejor. Esta Feria significará un reencuentro con su inabarcable obra, la que trascenderá hacia el futuro, con la misma fuerza de su permanente batallar.
Todos juntos, nos hemos trazado el objetivo de que en esta edición de la Feria, los lectores cubanos y nuestros visitantes disfruten de la buena literatura, no solo de producción nacional, sino de la editada por casas de Asia, América, Europa y otras partes del planeta.
Conmemorar importantes hitos de nuestra historia, reconocer a los mejores expositores, entregar los Premios Nacionales del año, entre otros momentos trascendentes, devendrán oportunidades inolvidables.
Favorecer la lectura en su más amplio alcance, con la participación de los múltiples gestores que la sostienen como bien social, ponderar el área de actividades con niños y adolescentes, la entrega del Premio Anual del Lector y el Salón Profesional del Libro, que congrega a importantes invitados, así como diversos eventos en torno a la edición, las bibliotecas y librerías, convierten a la FILH 2018 en un gran enclave cultural, no solo destinado a la venta de libros. A ello se suma un programa de presentaciones de obras y espacios en otras 22 subsedes, caracterizadas para diversos públicos, en las que tendrán lugar múltiples foros profesionales y académicos.
En este diálogo intercultural participan, además de la amplia representación cubana, unos 467 invitados, contando a autores, artistas, editores, distribuidores y directivos de gremios y asociaciones, que representan a 41 países.
La nutrida asistencia de invitados nacionales y extranjeros, confirma que la Feria es uno de los eventos literario-culturales más importantes del área, no solo por la masividad y el entusiasmo de su público, sino gracias a la calidad de sus programas y a la diversidad de propuestas que a ella concurren.
Este año, la Feria también está pensada para esos lectores del futuro que encuentran sus contenidos en tablets, celulares y otros dispositivos electrónicos. El proyecto Cubadigital pretende ser un espacio expositivo y comercial para estas producciones. Su mayor interés será promover en el público el empleo de productos digitales y fomentar el hábito de lectura. Gracias al enorme esfuerzo realizado por el Ministerio de Cultura, miles de libros podrán ser descargados de forma gratuita por los lectores, no solo en la capital, sino también a lo largo del país. Será posible el acceso a las aplicaciones y demás soportes electrónicos, potenciando estudios de consumo digital a través de encuestas de demanda insatisfecha y valoración del producto, realizadas por el Observatorio Cubano del Libro.
Para celebrar esta cita anual esperada por nuestro pueblo, unen esfuerzos el sistema editorial, la industria poligráfica nacional, instituciones culturales y académicas y organismos de la Administración Central de Estado.
Entre todos, posibilitan que se presenten más de 600 títulos y 2 millones de ejemplares en novedades, los que sumados a los inventarios existentes, garantizan una importante oferta de libros a nuestro pueblo, que sobrepasan los 4 000 títulos y los 4 millones de ejemplares. Es así como nuestro país, con sus autores, editores, diseñadores, promotores y demás trabajadores del libro, sustentará la feria y sus programas en otras 15 ciudades del país, hasta su cierre el 13 de en mayo, en Santiago de Cuba.
En la pasada feria, cuando celebrábamos los 50 años de la creación del Instituto Cubano del Libro, evocamos el papel fundador del Comandante en Jefe Fidel Castro en el desarrollo del libro, en un conjunto de políticas integradas y de la lectura como motor impulsor del conocimiento, el saber, la recreación y la elevación del ser humano.
Fidel fue un gran lector, un lector voraz, exigente, ávido del saber interdisciplinario, capaz de compartir con muchos sus conocimientos. Un lector que siempre se acompañaba del mejor amigo, ese que en sus páginas nos lleva a otros mundos, a conocer la Historia, el devenir humano de siglos y nos motiva a soñar. Un lector que antes que cualquier otra mochila, prefería llevar a su espalda la de sus libros del momento. Ese lector visionario soñó esta feria, la hizo todo lo grande que ahora es. Por eso, Fidel está hoy y estará siempre con nosotros, en cada una de las acciones y momentos especiales de esta y de todas las ferias que vendrán. Su obra revive en cada nueva edición, en su idea martiana de que se es más libre cuanto más se lee y de que al pueblo no se le dice “cree”, sino “lee”. Para ese pueblo que lee se hace esta feria del libro.
Declaro inaugurada la Vigesimoséptima Feria Internacional del Libro, Cuba 2018.
Excepcional la genialidad de Fidel.