Esta mañana el Aula Magna de la Universidad de las Artes (ISA) acogió la graduación de las facultades de Arte Danzario, Teatral, Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual y Artes Visuales. En el acto, que contó con la presencia de Alexis Seijo, rector del ISA y Kenelma Carvajal, Viceministra de Cultura, le fue entregado el título que los acredita como licenciados en sus especialidades a 36 jóvenes.

Según expresó Seijo, rector de esta institución académica, es importante destacar que uno de los logros obtenidos por estos egresados responde a su tenacidad. Pues han hecho una “búsqueda constante del tiempo en aras de lograr la conclusión de sus estudios y el desarrollo de sus carreras como artistas; han logrado el título de licenciados en algunas de las especialidades que se ofertan en el ISA”.

En sus palabras reseñó algunos de los momentos más importantes que los estudiantes llevan a cabo en la vida universitaria, a partir de sus experiencias en los espacios artísticos, con la asistencia a exposiciones, conciertos, puestas teatrales y otros; la realización de seminarios, ejercicios finales y de culminación de estudios que hoy los consagran como licenciados en especialidades y los dejan a las puertas de la vida profesional.

“El tránsito por la universidad les ha permitido la búsqueda continua, la experimentación y la inquietud del arte”, señaló.

Seijo también se refirió al papel destacado que han jugado los profesores, estudiantes y miembros de los consejos de dirección de las respectivas facultades y de la propia Universidad en un nuevo escenario marcado por la presencia de la pandemia y el necesario respeto de normas sanitarias para evitar su propagación.

Al final de su intervención Seijo recalcó que, durante este tiempo la Universidad ha sido “un espacio en silencio, pero vivo, espacio donde nos volvemos a ver y estoy seguro que ya ustedes comienzan a extrañar. Solo me queda agradecerle por este tiempo compartido”.

El Dr. Ismael Albelo, invitado a pronunciar las palabras en saludo a esta graduación expresó: “es necesario el análisis de los resultados académicos, entendidos como la fertilidad de los conocimientos que los maestros inoculamos en los alumnos, cómo le han servido —y mejor— le servirán en sus respectivas vidas futuras… Y no menos importante es el análisis de la preparación profesoral, la asimilación que los conocimientos académicos hayan podido calar en dependencia de nuestra eficiencia como comunicadores del saber”.

Por su parte, la egresada Amelia González Rodríguez agradeció a la Enseñanza Artística, a la Universidad y sus profesores por seguir contribuyendo a los logros de la mayor escuela de arte en el continente. “Es un sitio donde dejamos muchas huellas y sueños”.

“Es hora de mirar hacia adelante y proyectar, según nuestras ambiciones, esas metas soñadas. Ha llegado el momento de ser continuidad de lo mejor de la cultura cubana y poner el arte en función del arte”, dijo.

Entre los profesionales que recibieron sus títulos se encontraban figuras que ya poseen una destacada trayectoria profesional, como es el caso de Sadaise Arencibia, Gretel Morejón y Anett Delgado, las tres primeras bailarinas del Ballet Nacional de Cuba.

Igualmente, en el resto de los perfiles o especialidades se encuentran jóvenes con un alto potencial artístico en los campos en los que se desempeñan y que tributarán a un mejor desarrollo del arte en los medios de comunicación, las artes visuales aplicadas a la restauración, y en el ámbito escénico de la Isla.

La actuación del profesor Ernesto Oliva al piano complementó las alegrías compartidas en este acto que resultó sencillo, pero muy emotivo. Es el cierre de una etapa en la vida de los nuevos profesionales del arte que ahora se incorporan a su etapa como graduados; llevan en sí la impronta que la Universidad de las Artes ha dejado en sus cuerpos y en sus almas.