Juventud vs cambio climático
12/12/2019
Durante tres días sesionó en el Hotel Nacional el primer encuentro de la Red de Jóvenes Caribeños ante el Cambio Climático de la II Escuela Internacional de Ciencias de la UNESCO y la III Escuela Most en Cuba. El debate, que reunió a más de cien delegados durante las jornadas de trabajo, estuvo orientado a la protección y cuidado del medioambiente a partir de proyectos e ideas renovadoras traídas desde diversas regiones del área.
Con el objetivo de apoyar el liderazgo de la juventud en la reducción del riesgo de desastres y la adaptación al cambio climático, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) promueve esta nueva estrategia. Uno de los ponentes, Rodrigo Espinoza, representante del sector de las Ciencias Sociales de la UNESCO en Guatemala, aseguró que el propósito de la Red se desarrollará a corto, mediano y largo plazos. Asimismo, se refirió a las actividades que realizan las comunidades resilientes de su país en el empeño por prevenir los fenómenos naturales.
En entrevista realizada a la coordinadora de la Red de Jóvenes y representante de la UNESCO en Kingston, Jamaica, Andrea Gisselle Burbano Fuertes, comentó sobre la génesis del proyecto y los temas principales abordados en el encuentro:
¿Cómo y por qué surge el grupo de jóvenes caribeños?
Gisselle: El año anterior realizamos una reunión con expertos de diferentes áreas relativas al manejo del agua y los programas de la UNESCO: El Hombre y la Biosfera, y las Transformaciones Sociales. Durante los debates se focalizó la necesidad imperante de trabajar con los jóvenes alrededor del tema de los efectos del cambio climático sobre las poblaciones y las implicaciones que tiene. A partir de entonces, ha habido una manifestación explícita de la nueva generación que se proclama a favor de tomar medidas que sean inmediatas y eficaces para mitigar los efectos del cambio climático.
Tomando en cuenta este imperativo y considerando que la inercia no puede perpetuarse la UNESCO decidió respaldar a los investigadores y activistas de las naciones caribeñas. Nuestra meta es que entre ellos dialoguen, desarrollen ideas que sean realizables y factibles y que sus trabajos tengan incidencia en las políticas públicas de sus estados.
¿Qué propuestas fueron presentadas durante este primer encuentro?
Los jóvenes han expuesto un gran número de proyectos que pueden ser replicables en las diferentes islas; por ejemplo, algo tan simple como trabajar el aspecto del uso abusivo del plástico se realizó en Curazao, pero puede replicarse en cualquier región. Se trata de hacer una campaña de concientización para poder lograr el cambio comportamental; de modo que, espontáneamente, las personas rechacen el uso del plástico y haya menos contaminación. Sobre estos asuntos hubo varias ideas.
También se comentó sobre el límite ético establecido para cada persona sobre el uso de la huella de carbono. La mayoría de nosotros desconoce cuál es nuestra huella de carbono y cuál es ese límite, y sobre esa desinformación seguimos actuando de manera inconsciente.
En cuanto a resultados de esas ponencias y los debates en conjunto, nos percatamos de que muchas veces, cuando se trata del cambio de comportamiento, la juventud está más clara de lo que se requiere que los adultos. Uno de los casos señalados fue el de un niño, coleccionista de todo tipo de plásticos que después donaría a un centro de reciclaje, cuya madre, para evitar el desorden en el hogar, se los arrojó a la basura. Aquí vemos como hay más entendimiento de la situación por parte del pequeño que de la persona mayor. Desgraciadamente, cada acción que hacemos y cada paso que damos tiene un impacto en el medioambiente y en las comunidades.
¿Existe ya el vínculo con los medios de comunicación para difundir el trabajo que realizan?
Idealmente tenemos concebido sensibilizar de manera masiva a través de spots televisivos y otras vías; de ahí que la UNESCO pretenda hacer alianzas con los diferentes medios para llegar a un público amplio. Requerimos de una plataforma que facilite la interacción entre la Red y los Programas Intergubernamentales de Ciencia de la UNESCO. En el futuro aspiramos a incluir más países fuera de la zona del Caribe.
Con el lema: “Somos la primera generación que puede ayudar a erradicar la pobreza y la última que puede ayudar a enfrentar la crisis del cambio climático, ahora queremos actuar” se identifican los jóvenes que luchan por concientizar al mundo de la necesidad de frenar la contaminación ambiental en un planeta cada vez más dañado.
Queridos,
Cuando yo era niño, iba un guardabosques al aula y nos explicaba el por qué de cada árbol en el monte. Salpimentaba sus clases con historias de guijes, aparecidos y tesoros escondidos en árboles antiguos.
También sembrábamos un árbol cada 28 de Enero, en recuerdo a Martí. La protección del medio ambiente no debe ser solo un tema de especialistas y señores calvos que saben mucho. Hay que hacerlo llegar al hogar.
Miren los parques de nuestra Ciudad; cada vez que hay un ciclón se tala y no se siembra. ¿Por qué tenemos que esperar a que nos digan lo que hay que hacer? ¿Es tan difícil sembrar árboles por toda la Habana?
Una buena semana para ustedes!