La XI edición del evento Investigaciones del patrimonio Bacardí in Memoriam, realizada en Santiago de Cuba, se dedicó al aniversario 120 de la fundación del Museo Emilio Bacardí Moreau, Monumento Nacional y primero de carácter público abierto en la Isla.

Con la colocación de una ofrenda floral ante el busto erigido al patriota e intelectual en la pequeña plaza con su nombre, frente a la institución, iniciaron las actividades por la fecha, que se extenderán todo el año.

La doctora en Ciencias Históricas Olga Portuondo Zúñiga, historiadora de la ciudad, tuvo a su cargo la conferencia inaugural con el tema “Emilio Bacardí y su deportación a las islas Chafarinas”, en la cual profundizó en la etapa en que fue enviado por España a cárceles en ese archipiélago por sus ideas libertarias contra el colonialismo español.

Al ser puesto en libertad, recordó, llegó a Jamaica, donde se reunió con su esposa e hijos; y en Kingston fue representada la obra de teatro de su autoría: ¡A las armas!, cuya puesta en escena hizo la familia con el propio Bacardí como apuntador.

Luego de la intervención norteamericana en la Mayor de las Antillas, resultó de los primeros en llegar a Santiago de Cuba con dos tarjas dedicadas a José Martí y a Antonio Maceo, y en esa ocasión expuso la idea de fundar un museo, recordó la Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas.

El programa del encuentro científico contempló la exposición de 71 trabajos en seis comisiones, entre ellos, Historia local vinculada a las instituciones museísticas, Personalidades en el quehacer patrimonial, Museología y Museografía, Promoción y vida cultural desde el patrimonio, Conservación y restauración del patrimonio mueble e inmueble y Las tecnologías de la información y la comunicación en función del patrimonio.

Cada una de las comisiones premió las mejores ponencias, y entre los puestos cimeros otorgados figuraron Emilio Bacardí y la Revista Municipal de Santiago de Cuba (1902-1904), José Joaquín Tejada o la sinceridad en el arte; La interpretación del patrimonio en la propuesta de guion museológico del Castillo del Morro San Pedro de la Roca y, la Guerra hispano-cubano-norteamericana desde el cinematógrafo hasta las nuevas tecnologías.

Sus autores recibieron una lienzografía de la pintura La confronta de billetes o La lista de la lotería, del artista santiaguero José Joaquín Tejada y cuyo original se encuentra en el Museo Emilio Bacardí.

En ese ámbito fueron reconocidos Olga Portuondo, Gladys Collazo, presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural; Omar López, conservador de la urbe, y Luz Elena Cobas y Octavio López, jubilados del departamento de Historia de la Universidad de Oriente, por sus aportes al patrimonio desde la investigación, el rescate, promoción y conservación, y la formación de especialistas.

Los participantes abogaron por una mayor visualización en los museos del aporte de la mujer a la historia y la cultura, la socialización de los aportes en las investigaciones, realizar foros sobre las guerras de independencia desde una mirada plural al patrimonio, e intensificar las campañas publicitarias.

Para el 2021 fue convocada la XII edición del Bacardí in Memoriam, importante espacio para divulgar el quehacer de los museos e intercambiar experiencias.

En este sentido, especialistas del Museo Ignacio Agramonte, de Camagüey, entregaron a la institución santiaguera registros encuadernados con el estado de las cuentas de la fábrica de ron Bacardí y de Cervezas Hatuey, que datan de los años 40.

Annerys Fernández explicó que los 19 libros llegaron en un lote de piezas y documentos y se decidió que fueran donados al centenario museo, luego de recibir una limpieza mecánica para su conservación.

Primer Museo biblioteca de carácter público en Cuba

La apertura del Museo-biblioteca aconteció el 12 de febrero de 1899 con el papel protagónico de Emilio Bacardí. Hasta 1928 expuso sus colecciones en tres inmuebles, indistintamente, para mostrar al público las piezas y la historia de Santiago de Cuba.

Al arquitecto Carlos Segrera se debe el edificio actual, majestuosa edificación de estilo ecléctico inaugurada con esos fines el 20 de mayo de 1928, y a cuyo proyecto se consagró Elvira Cape, esposa de Emilio Bacardí, al ocurrir el deceso de quien fuera, además, alcalde de la ciudad.

Cuenta con tres grandes salas, una de ellas la de Artes Plásticas, ubicada en la primera planta, con valiosos exponentes como la colección de arte europeo con cuadros procedentes del Museo del Prado, en España, que llegó a Cuba a finales de 1898 como donación de ese gobierno.

La segunda planta acoge la sala de Historia, que comienza con un espacio dedicado a los fundadores: Bacardí, Elvira Cape, José Bofill Cayol, su primer director durante casi 40 años, y Federico Pérez Carbó, coronel del Ejército Libertador.

Igualmente refleja la historia de Cuba desde el período de las comunidades aborígenes y, en particular, la etapa referida a las guerras de independencia con objetos y documentos de Carlos Manuel de Céspedes, José Martí, Antonio Maceo y otros patriotas.

La tercera es la de etnografía, situada en el sótano, con objetos que revelan costumbres y tradiciones de pueblos y civilizaciones antiguas, donde resalta la colección de arte funerario egipcio que incluye una momia, el sarcófago y otras piezas que formaron parte de tales rituales.

También despiertan el interés de los visitantes las dos momias peruanas.

Como continuadores de la obra de Emilio Bacardí, los trabajadores del museo son celosos veladores de la conservación del patrimonio museístico y la divulgación de la historia que atesora, para el conocimiento de las actuales y futuras generaciones. (ACN)