Desde que los medios de comunicación anunciaron la gira nacional de Manolito Simonet y su Trabuco, miles de cubanos sacaron cuentas para no perderse los conciertos planificados en sus territorios y disfrutar de una agrupación que ha sabido “colarse” en el gusto del público a lo largo y ancho de la Isla, y más allá de sus fronteras.

Fotos: Rafael Fernández Rosell
 

Las presentaciones, organizadas por ARTEX y la agencia Clave Cubana, forman parte de las celebraciones por los 25 años del Trabuco, en tanto prevén un segundo momento, en el que se incluirán las provincias de Las Tunas, Baracoa, Guantánamo, Holguín, Santiago de Cuba y Granma.

Hasta el 25 de febrero —fecha en que se cumplen los 26 años de la orquesta— acontecerá la gira, la cual concluirá en el Festival de la Salsa de La Habana. Por ahora, la agrupación pone punto final a este primer periplo, que abarcó a Ciego de Ávila, Camagüey, Sancti Spíritus, Villa Clara, Matanzas, Pinar del Río, y cerró por todo lo alto en el capitalino Salón Rosado de la Tropical.

La interacción con el público bailador no faltó en cada espectáculo, y los asistentes pudieron cantar temas de ayer y de hoy, así como otros pertenecientes a La vida cambió, fonograma que acompaña la gira y constituye un recorrido por la trayectoria del grupo.

¿Cómo llega el Trabuco a sus 25 años? Ante esta interrogante Manolito no dudó en explicar que este hecho constituye un privilegio para cualquier orquesta: “Se requiere de mucha consagración y disciplina para mantenerse en la preferencia del público. La gente te busca y te quiere, y eso es una dicha. Cumplimos una etapa de la carrera y ojalá cumplamos otros 25, aunque muchos ya no estemos”.

Próximamente saldrá el fonograma Grandes éxitos de Manolito Simonet y su Trabuco, de la mano de nuevas orquestaciones, y se estima que concluirá antes del fin del actual calendario.

“Estamos preparando un grupo de conciertos internacionales, unos 20 en Europa entre octubre y noviembre, y 15 en América Latina y Estados Unidos. Además tendremos participación en numerosos festivales y eventos, a los cuales hemos asistido habitualmente”, precisó el compositor, arreglista y pianista.

A estas actividades se suma la tercera edición del Festival Sonido Camagüeyano, presidido por Simonet y realizado en la ciudad de los tinajones, su territorio natal.

“Morimos por la música cubana, porque ha sido una gran parte de la energía de la Isla; es la que ha exportado al mundo la energía de los cubanos”, aseveró el director del Trabuco poco antes del concierto en el parque del estadio Capitán San Luis, de la ciudad de Pinar del Río, y agregó: “La música popular cubana es uno de los estilos más importantes en el orbe, y ese privilegio no podemos abandonarlo. Eso también lo dirían Juan Formell, si viviera, Pupy, José Luis Cortés y muchos otros.

Manolito Simonet y su Trabuco mezcla lo más autóctono de la música tradicional cubana con sonoridades contemporáneas, y luego de 25 años sigue acompañando al pueblo desde los pentagramas.