Desde su fundación en 1989, el Consejo Nacional de las Artes Plásticas (CNAP) ha encauzado sus estrategias a favor del desarrollo y la promoción de las artes visuales en el país, en un camino en el cual se ha potenciado la creación en todas las manifestaciones que la institución ampara y promueve. Entre los propósitos y realidades que la entidad atesora en más de tres décadas de encargo social, destacan la activa presencia de artistas de generaciones y escuelas diversas; las relaciones con la enseñanza, fortalecidas gracias a la decisiva participación de la vanguardia artística en interacción con los claustros; así como el fortalecimiento del diálogo con los artistas.

Daneisy García, presidenta del CNAP, en exclusiva para La Jiribilla refiere los principales desafíos y realizaciones que ha enfrentado la institución en el más reciente lustro, periodo que nos separa de las jornadas del IX Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), en el cual a pesar de las dificultades que la realidad ha impuesto, la voluntad de crecer y trabajar en función del arte y los artistas ha marcado el itinerario.

¿Cuáles han sido los principales retos del Consejo Nacional de las Artes Plásticas en los últimos cinco años?

El Consejo Nacional de las Artes Plásticas (CNAP) ha enfrentado diversos retos en los últimos cinco años, enmarcados en un contexto de transformaciones globales en el ámbito de las artes visuales y un entorno adverso marcado por el recrudecimiento del bloqueo económico, financiero y comercial.

La evolución de las artes visuales, con la expansión de los límites conceptuales y la incorporación de nuevas poéticas, ha demandado una adaptación constante por el CNAP. La pandemia, por su parte, obligó a reinventar las formas de trabajo y explorar nuevas maneras de hacer arte.

El bloqueo ha intensificado las carencias y dificultades para la obtención de materiales, instrumentos y herramientas, lo que ha limitado la creación artística; además, obstaculiza las relaciones culturales y comerciales con el mercado internacional del arte, restringiendo las posibilidades de intercambio y promoción de los artistas cubanos.

“La evolución de las artes visuales ha demandado una adaptación constante por el CNAP”, comenta Daneisy García, presidenta de la institución. Foto: Juan Carlos Borjas

Ha sido un desafío para el CNAP expandir los espacios expositivos y garantizar la disponibilidad de recursos para la infraestructura y el equipamiento necesarios. Otro gran reto del periodo ha sido la gestión de los recursos humanos, en la búsqueda del completamiento de la plantilla laboral que garantice el funcionamiento óptimo de la institución.

Ante estas circunstancias se han fortalecido los consejos asesores e impulsado espacios para la participación de los artistas, lo cual ha sido fundamental para la concreción de los proyectos. Además, se trazaron estrategias de comunicación para promover a las artes visuales y sus protagonistas.

En este eje comunicacional se inscribe la producción de la revista Arte Cubano, publicación especializadaque se ha visto afectada por la disponibilidad de papel ya que requiere una calidad óptima de impresión lo que acarrea un alto costo en divisas. A pesar de estas dificultades, se han publicado más de 15 títulos gracias a coediciones y colaboraciones con empresas como Génesis, Caguayo y el Fondo Cubano de Bienes Culturales.

“El bloqueo ha intensificado las carencias y dificultades para la obtención de materiales, instrumentos y herramientas, lo que ha limitado la creación artística”.

Otro de los importantes propósitos en estos años ha sido la conservación, mantenimiento y exhibición de la colección institucional del CNAP, que recoge más de quinientas piezas de arte cubano contemporáneo. La responsabilidad de su custodia es una constante.

En este espacio de tiempo se celebraron los centenarios de los relevantes artistas Marcelo Pogolotti, Servando Cabrera Moreno, Manuel Couceiro y Adigio Benítez, con amplios programas de actividades en cada caso donde se incluyeron exposiciones y conversatorios.

Paisaje cubano, 1933, Marcelo Pogolotti / Tomado del Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba

También fue un objetivo cumplido en este lustro el reforzamiento de la programación cultural, con un crecimiento significativo de las exposiciones en todo el país, rubro que expone un total de 14352: 3000 (2019), 2980 (2020), 1701 (2021), 3586 (2022) y 3085 (2023).  

En el primer semestre de este 2024, 44 exposiciones de artes visuales fueron desarrolladas en galerías e instituciones subordinadas directamente al CNAP en La Habana; y en las galerías del FCBC, Galerías Génesis, y en el resto de las provincias alcanzaron la cifra de 799. En total se inauguraron en el primer semestre del año 843 exposiciones donde se propició el encuentro con los más diversos públicos y se reforzaron las actividades como visitas dirigidas, conversatorios y encuentros con el artista.

“El bloqueo comercial y financiero obstaculiza las relaciones culturales y comerciales con el mercado internacional del arte, limitando las posibilidades de intercambio y promoción de los artistas cubanos”.

En este periodo, ¿qué acciones han desarrollado para la atención a los artistas y sus demandas?

Una ganancia han sido los espacios dedicados a la crítica; desde el pasado año contamos en la sede del CNAP con el “Entre Nos”, conducido por Nelson Herrera Ysla, donde se han debatido importantes temas relacionados con la cartelística cubana, el diseño y la arquitectura, la fotografía, las nuevas tendencias del arte contemporáneo, el humorismo gráfico, presentaciones de libros por sus autores, la Bienal de la Habana. También, de reciente creación, se ha desarrollado el espacio de intercambio “El Andamio”, del Centro de Desarrollo las Artes Visuales. Se debe significar la activa participación del público en estas acciones, integrado fundamentalmente por artistas de diversas manifestaciones, estudiantes de las escuelas de artes, así como críticos y curadores; esta labor ha constituido un espacio de diálogo fundamental desde la institución donde se fomenta además la crítica en la manifestación a través del análisis de obras, proyectos o las tendencias actuales en las zonas de creación del arte cubano. 

“Una ganancia han sido los espacios dedicados a la crítica”. Foto: Tomada del CNAP

Otra manera de llegar a los artistas es la circulación del boletín digital Noticias de Arte Cubano a través de diversas plataformas, producido por el Sello Arte Cubano con frecuencia mensual, donde a partir de colaboraciones editoriales se recoge el quehacer de nuestras instituciones y artistas en todo el país.

Se ha implementado una estrategia de atención al humorismo gráfico, donde resulta significativa la apertura de la galería de 23 y 12 como espacio para la promoción y comercialización de esta manifestación en nuestro país. Se desarrolló la 1ra Bienal Internacional de Humor Político convocada desde el Ministerio de Cultura, El CNAP y la revista La Jiribilla, dedicada a la lucha contra el neofascismo, con la participación de 46 artistas de 22 países en la muestra central del evento  y un total de 14 muestras colaterales en diversos espacios como el Museo Nacional de Bellas Artes, Casa de las Américas, El Centro de Prensa Internacional, La Universidad de la Habana, La Casa del Alba, la Academia San Alejandro y los cines del circuito 23. Para nosotros fue muy importante trabajar de conjunto con un equipo de humoristas gráficos miembros de la Uneac desde la propia convocatoria, que luego integraron el Comité organizador del evento.

Hemos desarrollado un sistema de acciones para potenciar la gráfica y el grabado en el país, donde el Taller Experimental de Gráfica de La Habana ha jugado un papel esencial sobre todo en la concepción de muestras expositivas en sus galerías con exponentes de colectivos artísticos de Pinar del Río; Cienfuegos, Villa Clara, entre otros. Es muy importante lograr que cada una de las provincias mantenga sus talleres de gráfica activos, a pesar de todas las dificultades que podemos afrontar. Hoy se pueden hacer grabados con materiales muy simples y tenemos que explorar también las opciones que esa manifestación nos brinda.

Ha sido fundamental el vínculo con la enseñanza artística y como órgano rector para la política de las artes visuales en el país es imprescindible el intercambio con los futuros artistas, los que se están formando. Contamos con un espacio en San Alejandro, todos los miércoles a través de los Talleres de Promoción y Proyectos de las Artes Visuales, donde han intercambiado con los alumnos artistas que constituyen referente como Rafael Zarza, Pepe Menéndez, Arístides Hernández, Lesbia Vent Dumois, Diana Balboa, Duvier Deldago y Wilfredo Prieto; ha constituido además un oportunidad para intercambiar con especialistas de nuestras instituciones y desmontar procesos al interior de las artes visuales que van desde el funcionamiento de las empresas comercializadoras hasta la elaboración de dossiers o currículos de artistas. De igual manera se ha mantenido un estrecho vínculo con la Universidad de las Artes (ISA), incluyen la realización de eventos, exposiciones y espacios de la crítica. La ubicación de graduados en las instituciones del CNAP y el acompañamiento a los trabajos de tesis para la culminación de estudios.

“Hemos desarrollado un sistema de acciones para potenciar la gráfica y el grabado en el país”.

Es muy importante significar también las becas y premios que desde las instituciones del CNAP se otorgan cada año: Beca Estudio 21, convocada y otorgada por el Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, que tributa a la promoción de las artes visuales cubanas contemporáneas privilegiando el ejercicio de artistas que exploran nuevas zonas de la creación; Beca de Investigación Fotográfica “María Eugenia Haya (Marucha)”, convocada y otorgada por la Fototeca de Cuba, que tiene como objetivo estimular la producción de una investigación sobre el arte fotográfico, para estimular el análisis y la crítica de la fotografía, favoreciendo su mejor difusión; Beca de Creación Fotográfica “Raúl Corrales”, que propicia la producción de un proyecto de obra fotográfica y estimula la producción de aquellas imágenes culturalmente significativas que garanticen la continuidad de nuestra memoria visual; Beca de Creación “Wifredo Lam”, convocada y otorgada por el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam y tiene por objetivo brindar apoyo a los creadores en el terreno de las artes visuales sin distinción de disciplinas o manifestaciones, donde pueden concursar interesados en pintura, dibujo, escultura, instalación, arte objeto, performance, video, arte en la red o en los nuevos medios y soportes; también se convoca a la Beca de Investigación “Wifredo Lam”, encaminada a incentivar en nuestro país el ejercicio investigativo sobre las artes visuales, a través de proyectos con un perfil historiográfico o contemporáneo, resueltos desde las perspectivas generadas por las nuevas disciplinas de investigación cultural. De esta manera han sido beneficiados un total de 19 artistas en los últimos cinco años, lo cual contribuye a la realización de proyectos a través de su financiamiento.

Aunque aún nos queda mucho por hacer en cuanto a la proyección internacional, podemos hablar de la presencia de nuestros artistas en varios intercambios, eventos y ferias internacionales como la Bienal de Venecia en Italia, la Bienal del Sur “Pueblos en Resistencia” en Venezuela, la Bienal de Cerámica de China. Además se han materializado tres momentos para el intercambio con los artistas en Estados Unidos, en la Ciudad de Tampa y en Washington DC. También debemos mencionar la participación de nuestras empresas comercializadoras en ferias como Zona Maco en México, Artbo en Colombia o Arcos Madrid, España, y recientemente en la Feria del Libro de Serbia, no solo con la venta de los títulos de la editorial Arte Cubano sino también con dos magníficas exposiciones, una de fotografía, curada a partir de fondos del CNAP, y otra de grabado producida por el Taller de Gráfica de La Habana; acciones que debemos seguir trabajando para lograr una mayor presencia y, lo más importante, captar ingresos para el país.

Recientemente fue aprobada la Política de Comercialización para las Artes Visuales, ¿qué novedades nos trae en este sentido? 

La Política de Comercialización de las Artes Visuales da respuesta a muchas de las inquietudes de nuestros artistas en los últimos años, descansa sobre la base del diagnóstico realizado por el Consejo Asesor integrado por varios miembros de la Uneac y especialistas de nuestras instituciones. Hoy las normas complementarias del aparato regulatorio de las artes visuales se encuentran desactualizadas o no responden a las demandas actuales que enfrenta el sistema de comercialización.

De manera general, a través de la nueva Política, se trata de ampliar los espacios expositivos de venta de las artes visuales y artes decorativas a nivel de toda la nación, sin caer en el idealismo y la enajenación de pensar que una absolutización del mercado interno y externo de arte sea la plena solución a nuestros fines y problemas reales en ese sentido. Por eso se impone abrir el abanico de gestiones a la posibilidad de incluir otros destinos del arte como posibilidades útiles del trabajo de los artistas cubanos en su mayoría, y no sólo de una parte que labora dentro de lo que hoy se define como tipología artística de mercado. Podemos significar la aprobación de incentivos fiscales para estimular el patrocinio a la promoción de las artes visuales, el coleccionismo, las subastas y ferias, por parte de personas jurídicas y naturales cubanas y extranjeras. Aprobar la comercialización en las galerías de arte pertenecientes al sistema institucional de la cultura que cumplan los requisitos para ello, a través de las empresas de la cultura. Aprobar la comercialización de las artes visuales en galerías de otros sectores estatales que reúnan las condiciones. Autorizar la creación de cuentas con capacidad de liquidez a los artistas visuales y diseñadores, para que a través de las empresas cubanas autorizadas puedan adquirir en el exterior materias primas y materiales de creación e introducir incentivos fiscales para que ingresen aportes a las cuentas de las empresas y galerías como respaldo a la capacidad de liquidez, que permitan concebir presupuestos para asistir a ferias internacionales, pertenecer a sitios digitales especializados y adquirir publicaciones. Establecer nuevos mecanismos para fomentar y atender el coleccionismo institucional en el país como acción indispensable para la salvaguarda del patrimonio cultural de la nación y para estimular la adquisición de obras por personas jurídicas y naturales.

“La Política de Comercialización de las Artes Visuales da respuesta a muchas de las inquietudes de nuestros artistas en los últimos años”.

He citado algunos ejemplos que pueden dar un impulso a partir de la implementación de la nueva política dentro del sistema de las artes visuales en Cuba. Aspiramos a que nuestros artistas, instituciones y empresas puedan expandir sus horizontes, lo cual también implica un alto compromiso y nuevas responsabilidades. Hoy nos encontramos trabajando en la elaboración de las normas jurídicas que nos permitan su adecuada implementación.  

¿Cómo se ha integrado el CNAP a las acciones de promoción cultural en las comunidades?

Desde el CNAP también nos hemos sumado al trabajo en las comunidades, no solo desde los propios talleres de los artistas que están en estos lugares, sino también a través de las Expediciones Culturales del Mincult, hemos llegado con exposiciones, conferencias, ventas de libros. Las artes visuales tienen espacios en las galerías de todo el país, pero sacar la obra de la galería y llevarla hasta las comunidades siempre es importante, ir a buscar esos públicos que hoy necesitan se les despierte el interés con respecto a las artes visuales.

Hemos diseñado un total de 11 itinerancias por todo el país, no solo con piezas de la colección sino también exposiciones personales donde destaca la presencia de premios nacionales que han llegado a casi todas las provincias. Fragmentos épicos, muestra con fondos del CNAP, integrada por fotografía, instalación y escultura ha cumplido un gran recorrido; así como Che fotógrafo, un artista llamado Ernesto Guevara, con 270 imágenes provenientes de los fondos del Centro Che, realizadas por el Comandante Guevara entre 1954 y 1966; Palabras, imagen y posibilidad… muestra fotográfica colectiva integrada por 112 imágenes del Comandante en Jefe Fidel Castro con artistas e intelectuales en Cuba; Mi amiga Alicia, con obras de diversos formatos y soportes del Premio Nacional de Artes Plásticas 2009 Nelson Domínguez; Kemchs y Lira, exposición de humor gráfico resultado de la 1ra Bienal de Humor Político; Miradas Medulares, exposición de esculturas del Premio Nacional de Artes Plásticas 2008, José Villa Soberón; El toro por los cuernos, exposición de grabado del Premio Nacional de Artes Plásticas 2020, Rafael Zarza; Jardín Ideal, expo de pintura de la Premio Nacional de Artes Plásticas 2023 Zaida del Rio. En cada una de las inauguraciones se propicia el intercambio con el público y las vistas dirigidas con énfasis a los estudiantes del sistema de Enseñanza Artística. Y por último la producción y circulación de las muestras de humor gráfico Superhéroes y Dale Like por varias comunidades, no solo en el marco de La Bienal de Humor Político sino también insertadas en la programación, donde se destacan las Expediciones Culturales con la presencia de los humoristas gráficos.

Se han generado otras muestras en espacios como la Biblioteca Nacional “José Martí”, el Memorial José Martí y la galería de la Casa del Alba. Siempre tratamos de sacar las obras de los almacenes porque la idea de tener una colección es mostrarla, poner en valor las obras y que el público pueda disfrutar de ellas. Y hoy es una responsabilidad muy grande mantener esta colección en un estado óptimo de conservación de las piezas y poderlas exhibir como un acto descolonizador y de puesta en valor al patrimonio visual que atesoramos.

¿Qué otros proyectos ocupan al CNAP por estos tiempos?

El mayor proyecto en que estamos trabajando es la Bienal de La Habana. Este año se trabajó con una visión más amplia porque es la 15 edición de la Bienal en 40 años. Yo creo que la Bienal es el evento más importante de las artes plásticas en nuestro país.

La Bienal de La Habana fue creada a partir de la idea de Fidel para dar espacio y voz a los países del Tercer Mundo y mostrar la obra de esos artistas que no pueden encontrarse en los centros de poder ni en los grandes escenarios internacionales con sus exposiciones. Entonces la Bienal se encarga de invitarlos y traerlos a Cuba. Nuestro evento se ha definido como un espacio de confrontación y reflexión de singular importancia en el escenario artístico internacional, con el propósito esencial de contribuir a la investigación, difusión y reconocimiento de las artes visuales de Asia, África, Medio Oriente, América Latina y el Caribe con una perspectiva descolonizadora.

“La Bienal de La Habana fue creada a partir de la idea de Fidel para dar espacio y voz a los países del Tercer Mundo”. Foto: Tomada de Granma

Este año el lema es “Horizontes compartidos”. Se trata precisamente de compartir saberes, de tener una Bienal más inclusiva. Vamos a salir de los espacios habituales de las instituciones para llegar hasta las comunidades. Tenemos proyectos que tienen que ver con las estrategias del buen vivir; otro proyecto en Quisicuaba —sede del Centro de Vida Asistida en San Antonio de los Baños, Artemisa—, hermoso, donde nuestros artistas van a convivir allí con las personas que participan de esa iniciativa.

Vamos a invitar además a varios artistas que crecieron con la Bienal, que estuvieron en las primeras ediciones y hoy son artistas reconocidos internacionalmente.

Tendremos un evento teórico en el Museo Nacional de Bellas Artes donde van a participar importantes figuras internacionales para dialogar acerca de las tendencias mundiales y hablar de su visión, de qué cosa es para ellos la Bienal de La Habana.

Creo que va a ser un importante espacio que desde el CNAP, desde nuestro Ministerio y, por supuesto, del país, hemos defendido y mantenemos hasta hoy como un bastión. La Bienal de La Habana es ese escenario imprescindible y es el gran reto que hoy tenemos delante. Se va a desarrollar del 15 de noviembre de este año al 28 de febrero del próximo 2025, con un programa muy amplio de actividades que llegará a casi todas las comunidades de La Habana, incluso a otras provincias del país.

Hoy es un gran reto, ante todas las dinámicas del mercado que existen en el mundo, ante toda la situación que tiene no solo Cuba. De cara a la guerra, a la globalización, Cuba tiene una gran responsabilidad con el arte. Lo que se hace hoy en Cuba no se hace en ningún lugar. Las personas que nos visitan siempre se quedan maravilladas con la labor que se hace desde nuestras instituciones culturales, no solo desde la galería, sino también desde nuestro sello editorial.

Es una gran responsabilidad, pero no vamos a renunciar al empeño de continuar llevando lo mejor del arte cubano a cada rincón de nuestro país y al lugar donde nos llamen en el mundo para mostrar la obra de nuestros artistas.

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