La cultura cubana es el fruto de un largo y rico quehacer, que hoy día se nos muestra como un reservorio de la obra creada en esta isla, durante siglos de historia. A partir del legado aborigen —más rico de lo que hasta ahora hemos conocido— en esta isla nuestra se fundieron desde 1492 valiosos aportes, principalmente los provenientes de los elementos hispánicos, africanos, franco-haitianos y chinos, en un secular y peculiar proceso de transculturación. De ahí surgió lo que jocosamente denominó el sabio Don Fernando Ortiz “el ajiaco cubano”.

De criollos a cubanos se gestó una rica cultura que abarca un amplio abanico, pero que encuentra su más expresión exquisita en la música, la danza, las artes plásticas, las diferentes expresiones del folclore y del teatro. Preservar este patrimonio es de imperioso deber, ya que como sabiamente se ha definido la cultura es el escudo de la nación.

En la cita se debatieron temas referidos con el patrimonio escénico y su preservación.

Conscientes de este mandato en días pasados el Consejo Provincial de las Artes Escénicas de Villa Clara, convocó en la capital provincial el I Encuentro Regional de Patrimonio Escénico, que contó con una valiosa representación de especialistas villaclareños, cienfuegueros y habaneros.

Poco antes similar convocatoria tuvo como sede la histórica ciudad de Bayamo en el oriente del país. En este reciente encuentro, que contó con la entusiasta y eficaz gestión organizativa de Dunia Santana, presidenta de las Artes Escénicas de esa provincia y de Marilyn Garbey Oquendo, teatróloga y directora del Centro de Documentación de las Artes Escénicas María Lastayo del Teatro Nacional de Cuba, pudieron visitarse diversos centros fundamentales vinculados al quehacer escénico, tanto en las vertientes del teatro (dramático y de títeres), el folclore y otras manifestaciones del arte popular. 

Las sesiones de trabajo tuvieron lugar en diferentes sedes como la Biblioteca de la Universidad Central Marta Abreu, poseedora de la rica colección Coronado, cuyos fondos, de textos originales, en su mayoría manuscritos, constituyen uno de los más valiosos tesoros referentes al teatro bufo cubano.

“La danza, uno de los elementos más sólidos de la cultura escénica cubana, estuvo muy presente en este encuentro”.

En El Mejunje, prestigioso centro cultural que dirige el incansable promotor artístico Ramón Silverio, fueron celebrados importantes encuentros con Rafael González Rodríguez, sobre los 55 años de historia del Teatro Escambray; un conversatorio con Joel Sáez, director del Grupo Estudio Teatral y varios espectáculos enmarcados en el evento Mejunje Teatral, que incluyó interesantes puestas en Guantánamo y El Escambray. Particularmente interesante resultaron también las puestas en escena de La Noche de Tebas del Estudio Teatral y una presentación matutina del guiñol villaclareño.

La danza, uno de los elementos más sólidos de la cultura escénica cubana, estuvo muy presente en este encuentro, y reflejo de ello fueron las visitas a la Casa Museo de la Danza, que dirige el prestigioso maestro y coreógrafo Ernesto Alejo. Acompañados por la maestra Marta Anido, pionera de la danza en Santa Clara, lúcida y dinámica a sus 93 años, recorrimos las diferentes salas donde se custodian fotos, bocetos de diseños, vestuarios e innumerables documentos de gran valor patrimonial.

Invitados por el maestro Alejo, los participantes pudimos disfrutar de la puesta en escena de Poesía de Isla grande, de su autoría, bello espectáculo creado para festejar el XVIII aniversario de la Compañía Danza del Alma que él fundó y dirige.

Conversatorio con Joel Sáez, director del Grupo Estudio Teatral.

La escenificación tuvo lugar en el propio Teatro La Caridad que, aunque en reparación, abrió sus puertas para darnos una muestra de su infatigable amor por las artes. Otra faceta de gran importancia para los visitantes resultó la exhibición de un valioso muestrario de escenografías y vestuarios de las célebres Parrandas, que son un símbolo muy destacado del quehacer artístico popular en esta provincia.

Las discusiones y teorizaciones sobre la importancia de preservar nuestro patrimonio escénico, se efectuaron en la Sala Caturla de la Biblioteca Provincial. Incluyeron las conferencias del investigador e historiador de Danza Contemporánea de Cuba Jorge Brooks, sobre el tema “Doce años de Ramiro Guerra en el Conjunto Nacional de Danza Moderna” y la intervención de la Dra. Idamnis Monteagudo, profesora de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de La Habana y experta en la gestión patrimonial, quien abordó con rigor científico el concepto de patrimonio y la gestión para su protección. Este ciclo concluyó con la conferencia “Preservar los legados históricos: un deber”, a cargo del autor de esta crónica.

“Este primer encuentro regional de patrimonio escénico en la ciudad de Santa Clara ha sido un acontecimiento que llama a la toma de conciencia de la preservación del legado que acumula el patrimonio escénico en el centro de la isla (…)”

Este primer encuentro regional de patrimonio escénico en la ciudad de Santa Clara ha sido un acontecimiento que llama a la toma de conciencia de la preservación del legado que acumula el patrimonio escénico en el centro de la isla y también una convocatoria a que este reclamo se extienda al resto del país.

La próxima cita será en Pinar del Río y tendrá el objetivo de conocer todo ese tesoro acumulado en la región occidental de nuestro país. Al despedirnos, se impusieron dos palabras: el agradecimiento a las autoridades políticas y culturales por ser tan especiales anfitriones y por habernos dado la certeza de la conciencia que prevalece de que la cultura, ese escudo nuestro, tiene que ser sólidamente preservado, bajo cualquier circunstancia.

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