Coordinado por el Instituto de Historia de Cuba y la Unión de Historiadores de Cuba (UNHIC), tuvo lugar el panel “La Revolución Cubana en América Latina y el Caribe”, en el cual se analizó la participación internacionalista de la Mayor de las Antillas, así como la impronta del comandante Manuel Piñeiro Losada, figura a la cual estuvo dedicado el espacio de reflexión y debate, con motivo de la conmemoración del aniversario 90 de su natalicio.
En el evento estuvieron presentes Liliam Mendoza Estrada, directora de la Casa del Alba; Manuel Piñeiro Burdsall, hijo del destacado combatiente; Luis Alfredo Ilarregui, embajador de Argentina en el país; Joel Suárez Rodés, coordinador ejecutivo del Centro Martin Luther King, y María del Carmen Ariet, coordinadora científica del Centro de Estudios Che Guevara.
También asistieron Carlos Tablada, director de Ruth Casa Editorial; Alicia Conde Rodríguez, presidenta de la filial de la UNHIC en La Habana; Marcelo Durão, miembro del Movimiento de los Trabajadores Sin tierra; Pedro Martínez Pírez, periodista y diplomático cubano, y José Luis Cuza Téllez de Girón, quien fuera capitán del Ejército Rebelde. Concurrieron además representantes del cuerpo diplomático de la embajada de Venezuela y amigos de Perú y de Brasil.
El Dr. Sc. Andrés Zaldívar agradeció la posibilidad de compartir una ocasión dedicada al trabajo internacionalista, reconoció a figuras destacadas en esa esfera y compartió detalles sobre esa labor y la participación de muchos de los asistentes al conversatorio, entre los que estuvieron no solo participantes en misiones al extranjero, sino también un numeroso grupo con una trayectoria destacada en la diplomacia cubana.
En referencia a los panelistas del encuentro, Zaldívar comentó el quehacer de cada uno y elogió su producción teórica, la cual consideró de primer nivel en el análisis de la práctica solidaria cubana como una de las principales esencias de la Revolución.
“Ni Fidel ni el Che ni Piñeiro han muerto. Han cumplido bien la obra de la Revolución”.
Rafael Hidalgo Fernández, sociólogo y analista político, fue el encargado de moderar el encuentro. En su intervención inicial dedicó palabras de elogio a Manuel Barbarroja Piñeiro, a quien calificó como un ejecutor imprescindible de la política internacionalista, pues cumplía con rigor las orientaciones estratégicas de Fidel Castro. “Por la lealtad y la disciplina del Segundo Frente, se transformó en un gran, fiel y creativo colaborador del Comandante en Jefe. No fue un creador que imaginó iniciativas, sino un ejecutor disciplinado que aportó a la política internacionalista de Cuba”, añadió Hidalgo Fernández.
A su vez, Rafael compartió la significación de Ernesto Guevara y su nexo con las concepciones de Fidel en la proyección solidaria y en el proceso de construcción del socialismo. Asimismo, explicó los orígenes de la iniciativa y agradeció a las instituciones y personas involucradas.
Luis Suárez Salazar, intelectual licenciado en Ciencias Políticas, explicó algunos detalles sobre el trabajo de Piñeiro, el cual tuvo antecedentes significativos en su etapa en la Sierra Maestra. Igualmente rememoró los testimonios de compañeros del Servicio de Inteligencia referidos en uno de sus libros y aprovechó la ocasión para homenajear la labor realizada por ellos. “La historia de las instituciones estatales y políticas que fundó Piñeiro está insuficientemente contada y, en algunos casos, incluso tergiversada”, precisó Suárez, quien insistió en la necesidad de abordar esa parte de la historia.
En su alocución distinguió la separación entre la inteligencia y el movimiento de solidaridad, pues son actividades distintas que utilizan métodos diferentes. Comentó la creación de grupos especializados, la dirección de Fidel y la impronta de esas organizaciones y los desarrollos subsiguientes en base a las relaciones exteriores. “Ni Fidel ni el Che ni Piñeiro han muerto. Han cumplido bien la obra de la Revolución”, destacó.
El periodista y profesor Santiago Rony Feliú, por su parte, expuso un audiovisual referido a la obra del homenajeado, Cuarteto a Barbarroja, de Vicente Feliú. Con motivo de la exhibición del material compartió anécdotas sobre el combatiente, destacó su personalidad y lo calificó como un ser cien por ciento cubano.
En el referido espacio, el sociólogo y profesor Germán Sánchez Otero presentó sus reflexiones sobre el Che, Piñeiro y el accionar internacionalista de Fidel. Durante su intervención el investigador refirió la impronta del Líder de la Revolución y la significación contextualizada de esas figuras en momentos específicos, como fue el caso de la Operación Verdad. De igual forma, resaltó el vínculo de Cuba con América Latina y la necesidad de la solidaridad. Refiriéndose al Che, acotó los valores encarnados por esa figura histórica, sus principios éticos y las ideas sobre la construcción del socialismo.
En sus reflexiones sobre el apoyo brindado por esos líderes, Germán destacó cómo se complementaba la visión latinoamericana con proyecciones ecuménicas y universales, y resaltó el rol de esas consideraciones para afianzar la formación de valores humanos. “Sin internacionalismo no hay socialismo”, afirmó.
En relación con Piñeiro, consideró que era un hombre con un pensamiento de largo alcance afianzado desde sus raíces en el marxismo y en una cultura universal. “Para él ser leal a la Revolución y a Fidel era tan natural como respirar”, explicó en referencia al rol de Manuel como artífice incansable del consenso entre los revolucionarios.