2016, el año de Celdrán
15/1/2016
Un estreno, el vigésimo aniversario de Argos Teatro y un gran premio, así comenzó el año para el director teatral Carlos Celdrán, quien además de presentar en estos días Protocolo, su nueva puesta en escena, acaba de ser reconocido con el Premio Nacional de Teatro 2016, según dio a conocer el Consejo Nacional de las Artes Escénicas.
El jurado, presidido por la actriz Verónica Lynn e integrado por Carlos Pérez Peña, Eduardo Arrocha, Carlos Díaz y el compositor Juan Piñera, valoró la trayectoria de varios creadores nominados (Zenén Calero, Dagoberto Gainza, Xiomara Palacio, Fátima Patterson) y decidió de manera unánime conceder el galardón al director de Argos Teatro por “su sostenida impronta investigativa y escritural, sus creaciones legitimadas con premios y con el seguimiento de públicos y de la crítica especializada; así como por su magisterio teatral, su permanente indagación de la escena y su voto por estimular la búsqueda constante”.
Director y fundador de Argos Teatro en 1996, Celdrán dirige actualmente el Comité Cubano del Instituto Internacional del Teatro (ITI) y es miembro del Consejo Ejecutivo del ITI, organismo central adscrito a la Unesco.
Se graduó de la Universidad de las Artes en 1986 y cursó el Máster en Artes Escénicas en la Universidad Rey Juan Carlos, Madrid, España, en el 2011. Desde su graduación hasta 1991 formó parte del grupo teatro Buendía hasta que fundó su Argos Teatro, agrupación con la que ha desarrollado una de las zonas más interesantes del teatro cubano contemporáneo.
Considerado uno de los actuales directores cubanos más inteligentes y comprometidos con la creación y el arte teatral, Celdrán es —además—uno de los teatristas más premiados de la escena cubana de los últimos tiempos.
Este nuevo premio se suma a los numerosos reconocimientos de la crítica, dramaturgia y puesta en escena que ha obtenido, así como más recientemente el Premio Especial Omar Valdés de la Uneac por el conjunto de su labor creadora.
Sobre su visión del teatro ha dicho: “busco un teatro sencillo pero profundo, el teatro tiene que parecerse a la gente que lo hace. Debe ser transparente para que se plasme la realidad de cada historia, pero tratando de ir al fondo, para que permita llegar a la esencia de las cosas, de los problemas. Mi poética se basa en buscar cualidades entre el personaje y las personas”.
Mientras, con respecto a las dos décadas de vida de Argos que celebran este año, Celdrán comentó en un reciente encuentro con la prensa: “Cumplir 20 años en el teatro no es fácil, es un largo viaje en el que tienes que encontrar tu lenguaje y tu público. Es necesario saber quién eres teatralmente. Han sido muchas las etapas en las que he tenido que despojarme de lo aprendido para aprender y reinventarme todo el tiempo, pero me siento muy satisfecho de que estemos aquí haciendo teatro con vitalidad”.
El Premio Nacional de Teatro 2016 le será entregado el 22 de enero, Día del Teatro Cubano.