Una exposición que cierra para dejar un camino abierto
La exposición Hijos de Darwin se hace preguntas a través de la presentación de obras de artistas jóvenes cubanos que están en diferentes etapas de sus carreras. Una de las interrogantes que se plantea la muestra es cuándo un artista deja de ser joven. ¿Emergente y joven son sinónimos al hablar de artes visuales? ¿Es el autor o el carácter de su obra quienes se inscriben en dicho criterio? Estas preguntas son muy relevantes en el mundo del arte, donde la edad y la experiencia pueden ser cruciales para la carrera de un artista.
La exhibición de artes visuales Hijos de Darwin se basa en la máxima de que el individuo que sobrevive en determinado entorno no es necesariamente el más fuerte, sino el que logra adaptarse a dicho contexto, lo que se relaciona con la teoría de la evolución de las especies acuñada por el naturalista Charles Darwin. La muestra presenta una interpretación simplificada de esta teoría, extrapolando la idea al ámbito actual de las artes visuales en Cuba.
Esta exposición no pretende legitimar criterios estancos, sino que busca incluir a creadores cubanos que se mueven dentro y fuera de la Isla, con inquietudes y cuestionamientos a flor de piel. Se presentaron obras de artistas como Adrián Fernández, Alejandro Gómez Cangas, Alex Hernández y Ariamna Contino, Alfredo Sarabia, Daniel Rodríguez Collazo, Gabriel Cisneros, Gerardo Liranza, Jorge Otero, Lisandra Ramírez, Mabel Poblet, Rafael Villares, Roldán Lauzán, William Acosta y Yohy Suárez.
Cada artista con una interpretación única de su experiencia vital que influye de una forma u otra en su creación. Esto hace que la muestra sea interesante y diversa, con obras de diferentes estilos y técnicas. Lo que le da unidad y hace que la muestra sea tan especial es que presenta obras de artistas emergentes que han logrado continuar creando a pesar de las circunstancias que enfrentan, como la emigración, la inestabilidad económica y la incertidumbre de dedicarse al arte.
“Hijos de Darwin se basa en la máxima de que el individuo que sobrevive en determinado entorno no es necesariamente el más fuerte, sino el que logra adaptarse a dicho contexto, lo que se relaciona con la teoría de la evolución de las especies acuñada por el naturalista Charles Darwin”.
La exhibición también es importante porque es la primera muestra colectiva que presenta el Fondo de Arte Joven, como parte de las acciones por el lanzamiento de su trabajo en el ámbito de las artes visuales. La muestra Hijos de Darwin se inauguró en el Salón Blanco del Convento de San Francisco de Asís, en La Habana, un espacio que permitirá, de forma sistemática, promover la obra y los procesos creativos de artistas emergentes, con la colaboración de la Fundación Los Carbonell / NG Art Gallery, y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.
El Fondo de Arte Joven es una iniciativa creada hace pocos meses para la promoción del arte y la cultura en Cuba, especialmente para el impulso profesional de jóvenes artistas y emprendedores en el ámbito de la música y las artes visuales fundamentalmente. Esta no es la primera acción que desarrolla su equipo, puesto que ya lanzaron y premiaron una convocatoria para apoyar la producción de proyectos creativos y la sostenibilidad de emprendimientos culturales con impacto en el desarrollo local.
La plataforma del Fondo de Arte Joven aúna las voluntades de cooperación en el ámbito de la cultura entre la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (Cosude), el Comité Internacional para el Desarrollo de los Pueblos (CISP), la Fundación Los Carbonell, la Asociación Cultural Habana Clásica (ACHC) y el Centro de Intercambio y Referencia sobre Iniciativas Comunitarias (Cieric), con términos de referencia inscritos en el proyecto A Ritmo de Inclusión, financiado por la Unión Europea.
Sobre la exposición Hijos de Darwin, que se levantará en breve, puede decirse que abrió el camino para la activación de un nuevo espacio de acción y visibilidad para la creación artística. Es una muestra impresionante que presenta obras de artistas jóvenes cubanos que expresan la relación entre la teoría de la evolución y la adaptación con el arte contemporáneo. Fue una excelente manera de celebrar todo el trabajo que el Fondo de Arte Joven ya desarrolla en el ámbito de las artes visuales y de promover la obra y los procesos creativos de artistas jóvenes en Cuba.