En La Pérgola se habló de género, música, deporte y cine

Thais Gárciga
21/2/2017

La 26 Feria Internacional del Libro (FIL) acaba de concluir su etapa capitalina para comenzar su recorrido por otras provincias. Entre las actividades, celebraciones y sucesos de su abrumadora programación, uno de los que mayor satisfacción causó fue el Café Wichy en La Pérgola del Pabellón Cuba, sede de la Asociación Hermanos Saíz (AHS).

Los organizadores de la actual edición de la FIL tuvieron a bien retomar este espacio —que debiera extenderse al resto de las sedes de la Feria en el país—, para realizar y motivar debates sobre género, feminismo, masculinidades, música, videoclips, cine, deporte, estereotipos, y por supuesto, presentaciones de libros.

Escoger La Pérgola como el lugar de cita para estos encuentros no pudo ser más atinado. La sede de la AHS es uno de los puntos más céntricos de La Habana y figura entre los de mayor afluencia de visitantes durante la celebración de este tipo de eventos.

El espacio estuvo coordinado por la Dirección de Cultura de la capital, el Centro Provincial del Libro y la Lectura, y la Red Iberoamericana y Africana de Masculinidades (RIAM) que encabeza el historiador Julio César González Pagés. Entre sus invitados contó con la cineasta Marilyn Solaya, la cantante Rochy Ameneiro, el campeón mundial de lucha grecorromana Ismael Borrero, el actor Pancho García, las actrices Isabel Santos y Amada Morado, así como colaboradores y estudiosos de los temas de género desde diferentes disciplinas de las ciencias sociales.

De igual modo, estuvieron presentes integrantes y colaboradores de la campaña ÚNETE para poner fin a violencia contra las mujeres y las niñas, que lanzó en 2008 el secretario de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.

Todas se titula el próximo filme de Solaya, que se centrará en la historia de las feministas y sufragistas cubanas en los tres primeros decenios del pasado siglo en la Isla. Fue en esta época, específicamente en 1936, cuando una cubana por primera vez ejerció como votante en unas elecciones.

La tercera película de la directora de Vestido de novia (2014), se basa en el libro Historia de las mujeres en Cuba: en busca de un espacio, del propio Pagés, quien además será asesor del largometraje.

De igual modo, Rochy Ameneiro conversó sobre el Proyecto Tod@s Contracorriente y los videoclips que han realizado relacionados con la temática de la violencia de género; el último de estos protagonizado junto al cantautor David Blanco. Ambos forman parte de la red de artistas Únete.

Durante los debates se presentaron varios títulos, entre ellos algunos galardonados con el Premio Calendario de la AHS: ¿Es difícil ser hombre y negro en Cuba? Masculinidad y estereotipo raciales en Cuba (1898-1912), de Maikel Colón Pichardo; y Machismo y racismo en la política inmigratoria cubana (1902-1933), de Dayron Oliva. Ambos ganaron en la categoría de ensayo en 2014 y 2015, respectivamente; los textos son resultado de las investigaciones de sus autores y están a la venta en esta Feria, al igual que los últimos números de la revista Mujeres y otras publicaciones de la Editorial de la Mujer. También estuvieron a disposición del público libros digitales y materiales informativos.

El Café Wichy es solo botón de muestra de cuán efectivas y motivantes pueden resultar este tipo de iniciativas, sobre todo para los jóvenes, quienes mayormente asisten al Pabellón Cuba. En lo concerniente al tratamiento de la temática de género, donde queda mucho por abordar y sensibilizar, los encuentros amenos y sin pretensiones de tribuna, espontáneos, fluidos a la vez que instructivos, dan cuenta de que sí se puede hablar de feminismo y masculinidades sin derivar en el didactismo o el tedio.