La Promotora Literaria Pedro Ortiz Domínguez de Holguín promueve a través de las redes sociales y como una estrategia para el fomento de la lectura en días de COVID-19, su primera campaña de promoción literaria, con el nombre “Vivo enamorado del libro”.

“Ante la suspensión por segundo año consecutivo de la Feria del Libro en la ciudad de Holguín, el colectivo de este centro decidió confeccionar desde sus mismas bases un sistema promocional para incentivar el hábito de la lectura, que abarcará todo el año 2021”, asegura el reconocido escritor y promotor Moisés Mayán. “Los fundamentos teóricos, brillantemente recogidos por Ronel González, apuntan al fomento de la lectura en un sector tan vulnerable como el conformado por adolescentes y jóvenes”, añade.

 

“Lanzada el pasado 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, esta estrategia promocional pretende enamorar a un público que es un tanto esquivo al ejercicio de lectura”, comentó Rubenia Zaldívar, directora de la Promotora Literaria Pedro Ortiz Domínguez.

 

“Promover a los escritores holguineros, divulgar sus obras, ofrecer reseñas puntuales de los títulos que circulan en nuestra red de librerías, y acercar a los potenciales lectores a la página impresa, son algunos de los objetivos de esta campaña”, recalca Mayán.

 

Debido a las medidas implementadas ante el rebrote de la COVID-19, la campaña promocionará el trabajo de las editoriales holguineras a través de las redes sociales, en particular en el perfil de Facebook de la Promotora Literaria Pedro Ortiz Domínguez, donde se podrá establecer contacto con sus especialistas. “La ciudad se ha convertido en un hervidero de editoriales, a Ediciones Holguín se le han ido sumando Ediciones La Luz (AHS), el sello editorial La Mezquita (Unhic), la universitaria Conciencia Ediciones y Cuadernos Papiro, proyecto artesanal que produce libros coleccionables sobre papel manufacturado y que pertenece al Fondo Cubano de Bienes Culturales”, asegura Moisés.

 

Por otra parte, Holguín se ha consolidado como “plaza fuerte de las letras en el mapa de la literatura cubana, con autores y libros que constituyen referentes obligatorios en el panorama nacional”. “Vivo enamorado del libro” resulta una “apuesta por rescatar los afectos primordiales que han unido a libros y lectores desde el surgimiento de la imprenta”, y más en días donde el libro es un buen amparo ante el aislamiento social.