Selección de poemas

Dora Alonso
19/4/2016

La presumida

A Nubia.

La brujita rosada,
¡tan presumida!,
para acudir a la Plaza
se ha comprado una sombrilla;
un abanico de guano
para el verano,
y zapaticos negros
para el invierno.  

Las informales

Qué flores más informales
Las que tienen la picuala:
Son distintos colores…
¡y con olor a manzana!
 

Madama

Gran señora del jardín
-de ropa y quitasol verdes-,
ya se recoge la falda
para no rozar el césped,
ya entre remilgos se luce
y melindrosa se mueve.
¡Qué elegancia
de figurín de copete,
la madama!
 

Caballero

Caballero es el romero.
A la feria, de sombrero,
va el romero, y de bastón.
Y no sabe el caballero
que primero -¡lo primero!-,
si se toca el corazón,
es sentirse compañero,
aunque vaya sin dinero
ni corbata el caballero,
sin sombrero ni bastón.
 

La flor de la calabaza

Por la tarde, en la ventana,
¡qué amarillita lucía
la flor de la calabaza!
El maíz dijo al pasar:
-Ese color tan bonito
se lo acabo de prestar.
 

Como una niña fina

                                                                                              A Belkis, que ya sueña.

Como una niña fina,
la flor de pascua,
si la moja el rocío
le da las gracias:
-Muchas gracias, Rocío.
-No hay por qué darlas.
-¿Hasta mañana, entonces?
-Hasta mañana.
 

Tomado del libro Palomar

FICHA
Dora Alonso: narradora, dramaturga, poeta y periodista cubana considerada como una de las más importantes escritoras para niños. Nació en Matanzas, el 22 de diciembre de 1910 y falleció en La Habana, el 21 de marzo de 2001. Es la autora cubana para niños más traducida y publicada en el extranjero. Es la creadora de Pelusín del Monte, considerado el Títere Nacional. Entre sus libros se destacan: Tierra inerme, La Habana, Casa de las Américas, 1961 (Colección Premio); El valle de la Pájara Pinta, La Habana, Casa de las Américas, 1984 (Colección Premio); El cochero azul, La Habana, Editorial Gente Nueva, 1975; Palomar, La Habana, Ediciones Unión, 1979; Aventuras de Guille en busca de la gaviota negra, La Habana, Editora Juvenil, 1991; Cocorioco, Editorial Capiro, Santa Clara, 2000. Entre otros reconocimientos, mereció el Premio Casa de las Américas por la novela Tierra inerme (1961), Premio Casa de las Américas en la categoría de obras para niños y jóvenes con El valle de la Pájara Pinta (1980), Distinción por la Cultura Nacional (1981), Distinción Félix Varela de primer grado (1988) y el Premio Nacional de Literatura (1988)